•[ Una Apuesta Peligrosa ]• (BL)

Capítulo 20 - Confesión

Flashback del capítulo 19:

*-¿Mi hermano lo sabe?-

-...-

El albino frunció el ceño al no obtener respuesta.

-¡Responde!-

-No te ha dicho nada, por lo que veo.-

-... ¿A que te refieres, Uchiha?-

Ah, nuevamente la seriedad, la frialdad y la distancia se apoderaron de el ambiente. ¿Debería decirle la verdad al Senju? ¿Acaso debía hacer lo que Hashirama no hizo? Era obvio que el maldito moreno había escondido su relación al punto que jamás le diría a su hermano. Por un punto era lógico puesto que si Tobirama se enterase haría un escándalo. Por otro lado, ahora no eran tan...distantes. Hashirama podría haberle contado.

Recordó entonces la rivalidad entre los dos Senju.

Suspiró frustrado. Esta vez, Madara estaba en blanco. ¿Qué debía hacer ahora?*

-Fin del flashback.

La oscuridad reinaba en el cuarto, sin embargo eso no impedía que tanto Tobirama como Madara permanecieran frente a frente. Y esta vez, era el Uchiha quien no sabía como expresarse. El albino esperaba que le contara demasiadas cosas que en si no le correspondían. ¿Por qué demonios Hashirama no había dicho una palabra? 

Si, por un lado podía llegar a entender por qué. Tobirama había demostrado ser refractario ante la idea de que los Uchiha no eran enemigos de Konoha. Sin embargo, eso había sido hace casi un mes. En este tiempo, el peliblanco había demostrado ser buen maestro (dentro de lo posible) y seguramente el Hokague debía estar seguro de esto. ¿Entonces por qué diablos...?

-Deberás hablar de esto con tu hermano, Tobirama.-

-¿Por qué? ¿Acaso no es algo que puedas revelar?- 

-No me corresponde. Por la posición política de tu hermano, su pronto matrimonio y su evidente dificultad para afrontar problemas.-

-Uchiha, no me iré sin que me digas que demonios pasó entre mi hermano y tú. Y no me importará despertar a la academia entera y armar un maldito escándalo.- 

-¡Ah! ¡¿Ahora actuarás como un maldito ingrato solo porque no cumplo con tus caprichos?!- bufó el azabache.

Tobirama ladeó la cabeza, fastidiado. No tenía deseos de discutir. Realmente lo había pasado bien. Y finalmente había alcanzado al Uchiha de la forma que más deseó todo este tiempo. Y aún asi, no quería que las cosas terminaran mal. Pero el maldito problema, era que el rostro de su hermano venía a su mente todo ese jodido momento de tensión. Y no podía comprender las cosas.

 No quería hablar con su hermano. La única forma de poner ese tema en discusión con Hashirama incluía aclarar que Madara mismo develó aquella información. Y probablemente el Hokague terminase discutiendo el tema con la princesa Uzumaki y destruyendo tanto la reputación del albino como la del azabache. 

No, tenía que saberlo ahora y por Madara. ¿Por qué diablos no le dice y ya?

-Escucha, Madara. Tienes que contármelo. Actualmente... confío en ti para eso.-

El azabache abrió los ojos como platos. Eso no se lo esperaba. Viniendo de Tobirama, esas cosas si eran inesperadas. 

-¿Me estas diciendo que no confías en Hashirama?-