Un destino contigo [L.S]

Extra: primer encuentro

Primer encuentro
ante los ojos de Harry

Estaba por salir de mi habitación cuando vi que alguien a quien no conocía iba hacia la habitación de Galen... con Galen en brazos. Al principio me espanté, pero después recordé que ella siempre invitaba a su amigo a la casa, tal vez era él, la verdad nunca lo había visto.

Deje la puerta entreabierta para poder verlo. Era tan hermoso. En mi pecho mi corazón latía demasiado rápido. El chico desapareció al entrar al cuarto. No sabía qué hacer, estaba temblando. Salí rápido de mi habitación y corrí hasta las escaleras para después bajarlas con cuidado de no hacer mucho ruido, traté de esconderme detrás del florero que había aún lado de las escaleras esperando ver bajar al chico.

Él apareció por las escaleras, las bajaba lento o el tiempo se estaba deteniendo. No sabía que me pasaba que no podía despegar mis ojos de él, mi corazón se presionaba contra mi pecho y mis manos sudaban. Era como ver a un ángel. Sabía que me vería, cuando terminara de bajar sería imposible que no me viera. Tenía que irme, tenía que evitar eso, pero entonces ¿por qué no lo hice?

Vi que se volteó de vuelta, entonces salí de mi escondite (increíblemente sin hacer ruido) y me paré enfrente de las escaleras «Idiota ¿Qué haces? No tiene que verte», pero era muy tarde porque él había devuelto la mirada; cuando me vio dio un pequeño salto. Estaba unos cuantos escalones arriba, de frente pude ver sus hermosos ojos grises, me sumergí en ellos sin poder evitarlo, tanto que no note como él seguía bajando las escaleras.

Ahora estaba tan sólo un escalón arriba, nuestras miradas estaban exactamente alineadas, aunque veía sus ojos estaba observando todo de él: su cabello, su nariz, su boca, sus mejillas, su piel, ahora estando más cerca veía sus ojos de un color azul cielo. Quise levantar mi mano para acariciarlo pero me detuve. Por un momento me entristeció al pensar que era otra broma de mi imaginación, pero se veía tan real; nunca había conseguido poder manifestar mis sentimientos tan bien, aún y cuando sabía perfectamente lo que me gustaría hacer.

—Hola —sí no era mi imaginación era porque seguramente estaba soñando. Si eso era. ¿Cómo alguien tan perfecto podía existir? Más bien ¿Cómo alguien tan hermoso podía estar enfrente mío? Era un sueño. Así que no me esforcé.

—Señor Slorah, está lista su cena —escuché a Lilia llamarme desde la cocina, supe que era la señal que me debía despertar, así que lo vi por última vez y después me volví para entrar a la cocina y no mirar atrás.

Pero cuando entré a la cocina y vi que efectivamente estaba en la cocina caí en cuenta de que no era un sueño. Regresé rápido al recibidor pero él ya no estaba.

Mi pecho se comprimió de tristeza.