La foto era de una niña pequeña, parecía de ocho años de edad, se parecía a Anais en versión pequeña... y también a Galen. Viendo todo lo que contenía la caja de madera se encontraron con más cosas, el nombre de su hermana era Gisele, nació un año antes que Harry, pero por alguna razón la habían enviado al orfanato, eso lo supusieron porque todas las cartas tenían un sello que decía "Orfanato del Valle Oeste", al parecer la adoptaron cuando tenía nueve años, desde la carta en donde mandaba todos los datos de los padres adoptivos no había más.
Había muchas fotos de ella, desde bebé hasta algunas en donde se veía que jugaba con las otras niñas, pero hubo una foto en particular que Harry observó por mucho tiempo, era su hermana pero con otro niño a su lado, casi no podía verles la cara ya que ambos veían el muffin que tenían en las manos, por un momento algo le pareció familiar, quizá ya había visto a su hermana antes, pero descarto esa idea de inmediato al recordar que no había conocido a otra gente de su edad antes de los doce, pero no pudo dejar de ver la foto.
Harry no sabía cómo se sentía Galen, pero él se sentía feliz, tal vez estaba mal pero era así cómo se sentía. ¿Estaba mal que se alegrará?
Descubrir que tenían una hermana era algo increíble, en todos los sentidos, en el sentido de que es algo que no puedes creer así nada más te enteras, y en el sentido de que era asombroso descubrir que en el mundo tienes más familia de la que creías tener.
—Tal vez deberíamos de ir a dormir —le dijo una vez que notó que se había hecho extremadamente tarde, Galen sostenía una de las cartas pero Harry estaba seguro de que no la estaba leyendo.
—¿Por qué no nos lo contaron?
—¿Y cómo? ¿De verdad crees que nos iban a decir "oigan, tienen otra hermana pero la dimos en adopción y por eso no la conocen"? —se escuchaba tan tranquilo, tan indiferente que hacía que a Galen le hirviera la sangre de coraje.
—No te importa ¿verdad? —las palabras fueron escupidas con todo el enojo que sentía —¿Alguna vez algo te ha importado?
—Yo no dije eso.
—Pues suenas como si te diera igual.
—Lo sé —Galen le iba a gritar pero Harry habló rápido —. Siempre que hablo de algo que me importa hablo como si no lo hiciera, así soy y lo sabes, a mí me sorprende que aun te sorprenda.
—Sí, —respiró, intentando tranquilizarse —ya lo sabía, perdón.
—Ahora deja eso, tienes que dormir.
" . . . "
Se suponía que Louis iría a comprar los regalos aparte, de hecho su idea era ir con los chicos y así no tener que ir dos veces, pero cuando Galen le llamó y le dijo que por favor fueran juntos para comprar el regalo de Harry no pudo negarse, aparte de que había dicho que tenía algo muy importante que contarle. Sí era importante, él tenía que escucharla.
Pero nunca imaginó que fuera tan importante.
—... tenemos otra hermana.
Después de que dijo esas tres palabras ya no pudo prestar la debida atención a lo demás, la oía, pero no la estaba escuchando. ¿Otra hermana?
—... orfanato.
Fue la palabra que le llamó la atención, si bien en sus últimos trece años no fueron particularmente malos tampoco fueron generalmente asombrosos, aun así sintió un temblor en todo su cuerpo al escuchar esa palabra. ¿Tendría que contarle? No ahora.
—Creo que a Harry le importa —logró salir de su trance.
—Por supuesto, es su hermana.
—Sí, pero sabes a qué me refiero. No creo que Harry sea una persona que le importe mucho eso de que una persona tenga su misma sangre, él es más selectivo, por ejemplo, está feliz porque vas a cenar con nosotros en Nochebuena, porque él siente que eres su familia.
—Entiendo —iba a decir algo más, pero Galen también tenía algo más que decir, y era algo que importaba más que cualquier cosa que él fuera a decir.
—Quiero encontrarla.
—¿Qué? —si estuvieran en cualquier otro momento Galen hubiera llorado de la risa por la cara que había puesto. Pero el punto era que no era otro momento, era ese momento.
—Quiero saber que está bien, sé que Harry también quiere.
—¿No pensaste en buscarla en Internet?
—Sí, no tiene ningún perfil en ninguna aplicación con su nombre.
—Dudo mucho que tenga su nombre completo como user, de igual forma, debe de haber muchas cuentas con su nombre.
—¿Ves porqué te lo dije? Sé que tú puedes ayudarnos.
Aunque tardó segundos en responder, esos segundos los utilizó para darle mil vueltas al asunto con la poca información que tenía. Sí a dos de sus personas favoritas les hacía ilusión algo, lo que menos podía hacer era intentar ayudarlos. Intentar siempre era la respuesta para cualquier cosa. Eso y sonreír
—Lo intentaré, pero no soy ningún informático para prometerte algo.
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Un destino contigo [L.S]
Genç Kurgu-Estás condenado, hijo. Que no se te olvide, nunca -se dio media vuelta para salir. Al cerrar la puerta las lágrimas empezaron a resbalar por sus mejillas, hace mucho que no sentía ganas de llorar, todavía más el tiempo en que no se lo había permiti...