Akihito era un felino, era un Bobtail japonés y era Omega.
Aquel día Akihito decidió salir a tomar una copa, su madre le había insistido mucho, no era bueno que un joven de su edad sólo se la pasará trabajando. Había sido padre a temprana edad y no disfrutó de su adolescencia.
Fue a un centro nocturno muy famoso, estaba a reventar, había gente por todos lados y las feromonas no se hacían esperar.
El rubio fue hacia la barra y se sentó en un banco, pidió un trago suave. No sabía qué hacía ahí, nunca antes había asistido a un lugar similar, su vida giraba alrededor de su hijo y temía tener pareja, ya que su pequeño también era Omega.
Estaba tan metido en sus pensamientos que no vio a aquel enorme hombre que se paró junto a él.
— Hola. — Un delicioso aroma hizo que su atención fuera hacia el pequeño rubio sentado en la barra.
El rubio giró su rostro y observó a aquel y hombre en traje, sus ojos color almendra llamaron su atención, pero no más que aquella corbata tan colorida y llena de bordados.
— Dije hola ¿Eres mudo?
— Lo siento, hola.
— ¿Estas solo?
— Si.
— ¿Quieres acompañarme a mi mesa?
Akihito dudó por un segundo, pero al final aceptó. Siguió a aquel hombre hasta una mesa privada, en ese lugar había un chico y una chica.
— Ya estabas acompañado.
— Ustedes dos, váyanse, regresen a trabajar.
Ambos asintieron y salieron.
— ¿Trabajar? ¿Son acompañantes?
— Si, lo son.
— ¿Entonces por qué me pediste que viniera si ya tenías contratados a esos chicos?
— No estaban acompañándome, sólo les di instrucciones.
— No estoy entendiendo nada.
— Soy el dueño de este lugar, mi nombre es Asami Ryuichi.
Akihito comenzó a reír. — Y yo soy el dueño del bar de enfrente y me llamó Takaba Akihito.
— Conozco al dueño del bar de enfrente y no eres tú.
— Por favor ¿Te sirve esta táctica de ligue?
Asami presionó el botón de servicio y de inmediato estaba un mesero en el lugar. — ¿En que le puedo servir?
— ¿Quien soy yo?
El mesero un poco confundido contestó. — Asami Ryuichi, mi jefe.
— Gracias, vuelve a tu trabajo.
Akihito estaba sorprendido al ver que aquello no era una mentira. — Lo siento, no pensé que fuera cierto.
— No te preocupes. — Asami tomò asiento esperando que el menor se sentara junto a él, pero fue todo lo contrario, Akihito se sentó en otro sillón. — ¿Es la primera vez que vienes aquí?
— Si, de hecho no suelo salir de noche, sólo trabajo y después voy a mi casa.
Asami no puso atención a lo que decía el rubio, se levantó de su lugar y fue a sentarse junto a Akihito, muy, pero muy pegado a él, pasó su brazo por los hombros del menor y pego más a su cuerpo. — Por tu olor deduzco que no estás marcado y que eres un felino.
— Sí, soy un felino ¿Tú también?
— Si. Hoy venía a revisar algunas cosas, no pensé que conocería a alguien.
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El Misterio de su Aroma
FanfictionAsami Ryuichi un empresario Alfa de 35 años, un felino de raza grande (Puma) vivía aburrido de su vida normal, de su rutina. Una noche trabajando como de costumbre, conoció a un felino en uno de sus club's, pensaba que sòlo seria cosa de una noche...