Capítulo 10

3.2K 341 61
                                    

A la mañana siguiente, Akihito se levantó a la misma hora de siempre, aunque había dormido poco por su pesadilla y por que Akira había estado despertándose asustado.
Al igual que en su sueño, fue a la habitación del mayor y tocó.

— Adelante.

Akihito entró. — Siento molestarte tan temprano.

Asami ya estaba vestido y estaba guardando el arma que Akira había tomado. — ¿Qué necesitas?

— ¿En ese mueble tienes las armas?— Era un mueble con 6 cajones grandes.

— Si ¿Porqué?

— Estan al alcance de todos.

— En mi defensa, jamás pensé que un niño estaría en mi departamento.

— Tienes razón, los intrusos somos nosotros.

— No quise decir eso, pero dime ¿Que necesitas?

— Hablaste de que nos comprarías ropa, pero no es necesario, puedo ir a mi departamento por nuestra ropa.

— Ya te dije que no puedes andar solo, el dinero es lo de menos, tu seguridad es primero.

— Es que tengo que ir por otras cosas.

— ¿Que cosas?

Akihito bajó su mirada. — Mi celo… Mi celo está por llegar, necesito mis supresores.

— Te comprare supresores.

— No, es que mis supresores son hechos para mi, mi celo es muy violento y no cualquier supresor me calma.

Asami se acercó al menor. — Yo podría ayudarte.

Akihito le puso las manos en el pecho para alejarlo un poco. — No quiero que Akira me vea así.

Asami tomó las manos del menor y notó las heridas en sus nudillos. — ¿Qué te pasó? Ayer no tenias esto.

— Sin querer golpeé algo.

A Asami le molestaba mucho que le mintieran o le dijeran verdades a medias. — Ok, iré por tus supresores y ropa. Anoche mandé a limpiar el departamento de abajo, espero ya le hayas llamado a tu madre.

— ¿Departamento de abajo?

— La habitación en la que esta es muy pequeña para tres personas ¿Le llamaste?

— No, mi celular se lo quedaron esos hombres, pero le llamaré del teléfono de aquí. — El rubio se dió la vuelta, pero Asami lo detuvo.

— ¿Me tienes miedo?

— ¿Por qué lo dices?

— No me has mirado a la cara desde que entraste.

— Tengo vergüenza.

— ¿Por qué?

— Tuve un sueño.

— ¿Conmigo? ¿Era sucio? — Dijo en tono burlón.

— Si. — Los labios del menor temblaron. — Pero no terminó bien.

— ¿A qué te refieres? ¿Te hice algo malo? Te recuerdo que era un sueño, no es mi culpa.

— No quiero hablar de eso.

— Oye, dijiste que me dirias todo.

Akihito cruzó los brazos. — Comencé a hacerlo contigo, pero al final no eras tú, fue tan real y horrible.

— ¿Quién era?

Titubeó un poco, pero al final lo dijo.— El padre de Akira.

Asami suspiró y soltó al menor. — Veo que ese hombre está mucho tiempo en tu cabeza y sueños. Iré por tus cosas.

El Misterio de su AromaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora