El Misterio de su Aroma

Capítulo 23

Shinji salió directo a la oficina de Asami y para su sorpresa, el mayor iba llegando también.

— Shinji ¿Qué te trae por aquí?

— Que raro de ti llegar tarde.

— Me estoy mudando, dejé a Akihito en la nueva casa.

— Felicidades.

— Ahora dime a qué viniste, dudo mucho que vengas de visita social.

— Es Riku.

— ¿Ya hablaron?

— Un poco, ya sé que soy padre.

— Que bueno que aclararon eso.

— ¿Por qué no me lo dijiste?

— Él no quería y no es un tema que deba importarme a mi.

— Yukihiro lo atacó en la mañana, usó sus feromonas.

— ¿Abuso de él?

— Afortunadamente la madre de Riku lo detuvo, pero se que volverá a intentarlo. Vine porque quiero protección para Riku.

— Mierda, iba a ponerle protección desde ayer y lo olvidé.

— Te agradecería que lo hicieras.

Asami sacó su celular e hizo una llamada que duró muy poco. — Listo.

— Gracias.

— De nada, ahora déjame trabajar, tengo que terminar mucho papeleo.

~°~

Akira vio cuando llegaron las cajas de sus cosas, corrió hasta la habitación donde las habían dejado, en ese lugar estaba Kirishima tomando medidas.

— Disculpe señor Kirishima ¿Puedo buscar la laptop en las cajas?

El mayor contestó sin voltear. — Si, sólo no hagas un desastre.

Akira fue hacia las cajas, pero estaban selladas con mucha cinta, intentó arrancar la cinta con las uñas, pero no pudo, estaba por usar los dientes cuando el mayor se acercó y le prestó una navaja. — Usala con cuidado.

— Gracias. — El menor abrió la primera caja sin dificultad, en ella no estaba lo que buscaba, fue a la segunda y por descuido se hizo una pequeña cortada en el dedo. — Auch. — Murmuró mientras miraba la sangre caer.

Kirishima pudo sentir el olor a sangre, se giró de inmediato y pudo ver al menor con el dedo en la boca. — ¿Te cortaste?

— Estoy bien, lo siento.

El mayor se arrodilló y tomó la mano de Akira. — ¿Te duele?

— Un poco.

— Mierda, me va a matar el jefe, no debí prestarte la navaja ¿Que edad tienes?

— Tengo 13, pero yo diré que la tome sin permiso, será mi culpa.

Kirishima sacó un pañuelo de su bolsillo y cubrió el dedo del menor. — Te comportas como un niño de menos edad, necesitas desinfectar.

— Yo lo haré, usted siga con su trabajo, siento haberle causado tantos problemas. — El menor se levantó y salió corriendo.

Kirishima limpió la navaja y abrió las cajas para buscar la laptop y dejarla en la habitación del menor.

[...]

Era de noche cuando Asami regresó a casa, un guardia le dió el informe del día. Subió a la habitación principal y para su sorpresa, Akihito estaba dormido con Akira a un lado. Él sabía que esto pasaría, el niño tenía terrores nocturnos por lo que había pasado, tenía que aceptarlo.