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Narrador Omnisciente 

El día de la posesión había llegado y desde muy temprano la casa de los Pimentel estaba hecha un caos, Joel tuvo que levantarse bastante temprano para alistar papeleo y demás cosas mientras que Erick se levantó hasta las 10 de la mañana. Días anteriores a estos no había podido dormir bien pues se despertaba de madrugada para verse una y otra vez al espejo de cuerpo entero, estuvo reduciendo sus porciones de comida y saliendo a correr en las tardes por 2 horas.

Hoy se sentía algo mareado pero sin darle mayor importancia se bañó y arregló con algo muy simple pues el traje se lo debía de colocar en la noche. Apenas estuvo en el primer piso, se dió cuenta del gran alboroto que había, todos corrían de un lado al otro y él ajeno a todo esto salió por esa gran puerta en dirección a la casa de su madre.

Después de unos minutos a pie llegó hasta aquella bonita casa donde vivía su madre, tocó y ella lo recibió con aquella sonrisa cálida que tanto lo calmaba.

-Hola mamá

-Hola hijito, pasa-Ambos entraron y se sentaron en el sofá de la pequeña sala.

-Cómo estás? Hace mucho no hablamos.

-Muy bien y tú?

-Bien-Mintió dejando atrás todos los recuerdos de las últimas noches.

-Seguro?

-Claro que si ma,por qué lo dudas?

-Hijo, te tuve 9 meses en mi vientre y crees que no sé cuándo me mientes? Algo te pasa y parece que es algo muy malo.

Suspiró y miró a su madre con los ojos llorosos- No estoy en mi mejor momento con Joel.

-Pelearon o algo por el estilo?

-Hace algunas semanas Joel comenzó a estar distante de mí por los preparativos y de algún modo era comprensible  pero un día que decidí ir al centro comercial lo ví en una joyería con una mujer y ambos estaban muy juntos, no  me vieron pero aún así  me fue inevitable no imaginarme miles de cosas, mamá. Ella es la chica perfecta para que sea la pareja del heredero Alfa, osea es que con solo verla te das cuenta que es mucho mejor partido que yo.

-Pero te atreviste a preguntarle a Joel sobre quien era esa mujer?-Él negó- Hijo no puedes decir que es un buen partido si ni siquiera sabes quien es, un buen  cuerpo no supera a una actitud y un corazón tan lindo como el tuyo.

Siguieron hablando durante horas como lo solían hacer antes, almorzaron juntos y Erick tuvo que volver a casa de Joel para poder arreglarse para esta noche, apenas llegó fue recibido por Michelle quien lo arrastró hasta el garage.

-Qué pasa Mich?

-Erick necesito que me ayudes con mi vestido para esta noche

-Aún no lo tienes?-La cuestionó sorprendido.

-No...Con tantas cosas en el hospital no tuve tiempo.

-Vamos, agarra las llaves del deportivo de Joel para ir al centro comercial.

Michelle las agarró y ambos se montaron en este, Erick iba como copiloto y mientras Mich manejaba le mandó un mensaje a Joel avisarle que había salido en el deportivo. Apenas llegaron a su destino fueron corriendo hasta el segundo piso donde se encontraba una de las tiendas de vestidos.

-Ve por ese lado, yo voy por este-Le indicó Michelle a Erick.

Era una búsqueda difícil pues habían vestidos de todas las clases desde los más caros hasta los más simples. Después de varios minutos ambos chicos llegaron a los probadores  con muchos vestidos.

TAL Y COMO SOY  |  JOERICKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora