capitulo 5

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Lenna POV

- ESTAS JODIDAMENTE LOCA SI CREES QUE VOY A HACER ESO! - gritaba Roberto desde la otra azotea.

¿ y luego soy yo la exagerada? ¿ es en serio? Rode los ojos y bufe molesta.

- Maldita sea Roberto. ¿ Tantos años haciendo parcour para que ahora te achantes? Esto tiene que ser una jodida broma... - conteste enfadada.

Habia dicho que la ruta mas segura hasta casa de Sheena era ir por las azoteas mientras pudieramos y hasta ahora nos habia ido bien. No nos habiamos cruzado con ningun zombie y desde aqui arriba se controlaba todo.

-Vamos princesa. No me hagas ir a por ti! - grite mientras me daba la vuelta y comenzaba a caminar.

Habiamos pasado casi siete años haciendo parcour por toda la ciudad y ¿ se achanta ahora por saltar una pequeña azotea de un par de metros? Y luego me dice trastornada a mi, el soplagaitas.

Estaba llegando a las escaleras de incendios que bajaban hasta la calle, cuando escuche el ruido de la arenilla y unos cuantos gemidos.

- Auch -se quejaba roberto mientras caminaba hasta mi.

- ¿ fue tan dificil princesa? - dije divertida.

El solo me miro mal y me saco el dedo grosero. Rei.

-venga vamos. Estamos a dos casas de la casa de Sheena. - dije mientras bajaba por las escaleras.

(...)

Hize una mueca mientras sacudia la katana en el aire. Habia tenidonque usarla con un par de zombies y apestaba a sangre y a huevos fermentados.

Alce la vista hasta la hermosa casa de Sheena. Era pequeña y humilde, de dos plantas.

Camine detras de Roberto hasta la entrada y llamamos al timbre.

- ¿Quieres dejar de hacer esa cara de asco? - dijo Ro , gracioso.

-Es que ahora la katana apesta y es asqueroso. -conteste a la defensiva.

En ese instante se abrio la puerta de la casa de Sheena, quien estaba en pijama y con una taza de chocolate caliente en su mano.

Sus ojos nos recorrieron de arriba a abajo y se detuvieron durante unos segundos en la katana. Cuando alzo la vista hasta mis ojos, sus cejas estaban fruncidas.

- Lenna,crei que ya te habia dicho que si sacas la katana a la calle, te detendra la policia. - dijo entre confusa y cabreada.

Yo solo pude reir. Era de esperar. El mundo puede irse al garete y Shenna no se enteraria.

-Sheena... ¿ es que no te has enterado? - pregunto Ro extrañado.

- ¿ De que deberia enterarme? - dijo bebiendo algo de chocolate.

Ro se rasco la nuca en señal de nerviosismo.

- Sheena. Duchate y vistete con ropa comoda y practica. Te vienes con nosotros. El resto ya lo iras viendo tu sola. - conteste algo molesta.

Ella me miro durante unos segundos y se dio media vuelta entrando en casa. Ro y yo enteamos cerrando la puerta detras de nosotros. Ro se sento en el sofa de la sala, mientras que yo me fui a la cocina dispuesta a limpiar la katana.

Quince minutos despues, Shenna bajo con una ropa similar a la nuestra y con un cinturon con los cuchillos de caza de su padre. Ro dejo su vista fija en los cuchillos.

-No los mires asi. Si Lenna lleva la Katana por algo sera. - dijo excusandose.

Yo solo sonrei mientras me colocaba la katana a la espalda y caminaba hacia la salida, seguida por Sheena y Roberto.

(...)

Llegamos a casa de Miki. Como imagine, nadie responde al timbre asique me preparo a tirar la puerta, pensando en si miki estara bien.

Sheena no a abierto la boca desde que vio como un zombie intentaba comersela. Lo cual internamente agradecia, no necesitabamos a alguien histerico.

Escuche como la puerta cedia de su lugar, dejandonos pasar al interior de la casa.

Caminamos en silencio en la oscuridad, ya que absolutamente todas las ventanas tenian las persianas bajadas y las contraventanas cerradas. Rei al recordar la paranoia de miki por la seguridad.

Me sobresalte al sentir la mano de Ro en mi hombro. Con un movimiento de cabeza me indico que bajaramos al sotano. Asenti. Ay es donde suele estar Miki, en su super laboratorio. ¿ cuantos ordenadores tenia la ultima vez que bajamos? ¿ 10 ? No, creo que 15. Y todos conectados entre si.

Bajamos en silencio los escalones, era un espacio muy pequeño y si habia algun zombie en  el camino iba a estar imposible esquivarlo.

Oribion.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora