#010

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La noche reinaba en aquel lugar, todos estaban dormidos, ese día Naruto había decidido dormir en su habitación, y eso fue lo que hizo.

Al quedarse totalmente dormido sintió su espalda mojada.

¡Oh oh!

Fue él pensamiento del rubio, sin embargo cuando abrió los ojos pudo notar que no estaba en su cama ni se habían hecho pis, sino que se encontraba en una alcantarilla.

A lo lejos pudo sentir una presencia maligna, llena de rencor y odio, a paso lento se acercó a ella.

Y de pronto se vio frente a una gran jaula, una jaula que era cerrada por un sello, en cuanto se acerco de su estómago empezó a fluir una gran cantidad de chakra.

Curioso levanto su camisa dejando ver un singular sello y de un momento a otro unos ojos rojos rubí lo miraban.

Pero él pequeño no se intimido, no, solamente siguió avanzando hacia aquella jaula, con aquellos agudos ojos sobre él.

—Si te acercas un paso más te comeré— la voz de aquella presencia era fuerte.

—No puedes comerme— aseguró él niño con confianza—, por que yo te comeré a ti.— la sonrisa del niño era infantil, pero sus ojos no podían decir lo mismo.

De inmediato la risa de aquella gran figura se hizo presente, y el pequeño también rio, el ambiente se volvió ligero.

Ambos se observaron por un buen rato, hasta que nuevamente el rubio empezó a acercarse a aquella gran figura.

—¿Qué eres? O ¿Quién eres?— Los ojitos del niño lo escaneaban de arriba a abajo, estaba a unos pasos de pasar la gran reja cuando la gran figura se movió.

—Soy el demonio que vive en tu interior— la voz del mismo se hizo gruesa y mostró sus colmillos—, gracias a mi no tienes una aldea.

La voz también se hizo más malvada, miraba al rubio con sonrra que este en vez de parecer triste o enojado tenían una cara de confusión, y miro al gran zorro, por primera vez en su estancia notaba que era un zorro, uno muy grande y al parecer enojón.

—Soy Naruto Uzumaki, un gusto dettebayo— y aquella sonrisa nuevamente iluminaba el rostro del menor dejando confundido al gran zorro.

La gran presencia lo miro extrañado, era la primera vez en todos sus lustros de vida que alguien le hablaba así, no se sentía molesto pero si aturdido, si bien sabía que él pequeño era travieso, no se esperaba eso.

El mayor busco rastro de mentira en él rostro del menor pero no lo encontró, y estaba por caer cuando recordó la broma que le hizo a Tobi inculpando a Hidan, aquel niño era muy bueno mintiendo y manipulando, era de tener cuidado.

Pero sus pensamientos se vieron interrumpidos por algo que se acercaba a su pata derecha y la tocaba con asombro, era el rubio que ya estaba frente a el tocando el pelaje del gran zorro.

—¡Woah! Es muy suave dettebayo.

Era la segunda vez que decían la muletilla, no mentía, realmente estaba emocionado, pues de cualquier manera se aburría de no tener con quien jugar, claro de su edad, tal vez Deidara era solo un poco grande pero era muy explosivo, Hidan era muy sádico, Itaci muy sobre protector, Tobi muy torpe, Kakuzu muy aburrido, Kisame muy malvado, Konan muy inteligente, Pain muy sabio, Zetsu muy rebelde y bipolar, o y Sasori era un abuelo amargado.

Si definitivamente necesitaba amigos, por eso tenían que convencer a aquel gran zorro de ser su amigo, a demás era muy suavecito y cálido.

—Soy Kurama mocoso.

El pequeño asintió feliz estaba muy entusiasmado, después de todo, por algo se empieza, ¿no?.  






Última actualización:

27/10/21

Naruto en Akatsuki [✔ ] Wattys 2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora