Long Way Home - Marco Reus. {Editando}

Capítulo 2.

"How did we end up talking in the first place, you said you like my Cobain shirt, now were walking to your place, you're telling me how you love that song about living on a prayer, I'm pretty sure that we're halfway there and when I wake up next to you I wonder how did we end up here?"

Al llegar al club que Summer había elegido para celebrar mi cumpleaños, me arrepentí de nuevo sobre esa noche.

No quería estar aquí, menos con un montón de personas que solo quieren acercarse a ti para luego ver sus rostros en una revista o programas de chismes. No me importaba cuando eso sucedía, porque así era el medio, pero no me gustaba estar rodeada de ese tipo de personas en momentos que se suponen son especiales. Siempre fingían ser tus amigos para conseguir un poco de fama. Era un asco, pero era la realidad.

Summer, era lo más cercano a una amiga. Trabajábamos para la misma agencia y éramos representadas por la misma persona, así que nuestro trabajo nos hacía pasar mucho tiempo juntas y eso ayudó a crear una amistad. Éramos muy diferentes, ella era rubia y extremadamente alta, amaba las fiestas, era muy ruidosa y donde estaba siempre había risas.

Había aceptado venir con ella por la simple razón de que pronto regresaría a su país, Australia, por unos meses y había dicho que esta era una de nuestras últimas fiestas juntas, además era imposible soportarla cuando quería algo.

Yo por mi parte, me iría a Los Angeles unos días, aprovechando mis vacaciones, que siempre se ven interrumpidas por trabajos inesperados, pero aún así se pueden llamar vacaciones.

Todos esperaban que regresara a Alemania, pero no estaba lista para eso y dudaba alguna vez estarlo.

Debía enfrentar muchas cosas al volver, revivir momentos, reencontrarme con muchas personas, quizás estaba siendo cobarde e inmadura, sabía desde hace mucho que debía volver, aclarar mi pasado y que sería la única manera de avanzar.

Pero simplemente, no podía.

"Estiré mis brazos cuando desperté y ahí fue cuando golpee algo dándome cuenta de que algo o mejor dicho, alguien estaba a mí lado, así que abrí los ojos de inmediato. Oh joder. Los cerré de nuevo y me pellizqué.

Bien, al parecer Marco Reus sí estaba en mi cama.

Comencé a recordar todo lo que había pasado la noche anterior para tratar de entender que estaba haciendo aquí, y así.

Marco se había quedado el resto de la fiesta conmigo para mi gran sorpresa y la de algunos presentes, hablamos, bailamos y a eso de las 2 de la mañana, habíamos decidido dejar la ya descontrolada celebración, él se había ofrecido a acompañarme ya que solo vivía a un par de calles de distancia, al igual que él, aunque dijera que no, nuestro camino era el mismo, y ¿a quién iba a engañar? No iba a rechazarlo.

Y aunque vivía a solo dos casas de la mía, no éramos precisamente amigos. Saludos de lejos y visitas de nuestros padres. En realidad lo más que habíamos hablado antes de esa noche, había sido en alguna otra fiesta y nada fuera de lo común.

Él era el chico rubio, atlético con un gran futuro que hacía amigos con tal facilidad que costaba creer que había espacio para alguien más.

Yo solo era la chica castaña, aburrida, que amaba leer y deseaba irse de esta ciudad para cumplir sus sueños.

Recuerdo que en el camino, hablamos de estúpidas cosas, gustos y metas, estábamos despidiéndonos en la entrada de mi casa, y después me había robado un beso.

Volví a mirar al chico que estaba a mi lado durmiendo tranquilamente.

¿Cómo fue que terminamos aquí?"