Long Way Home - Marco Reus. {Editando}

Capítulo 18.

"When I close my eyes and try to sleep, I fall apart I find it hard to breathe, you're the reason, the only reason. Even though my dizzy head is numb, I swear my heart is never giving up, you're the reason, the only reason."

Los minutos pasaban y ninguno de los dos decía nada, yo seguía frente al escritorio de Klopp y Marco se había sentado cerca de la puerta.

Sé que debía hablar, pero no sabia como comenzar.

-¿Qué pretendes con todo esto? -Marco se levantó y se acercó a mi.- No lo entiendo, ¿por qué no te vas a Londres y sigues feliz con tu vida?

-¿Te parezco muy feliz?

-La verdad si. ¿Ese no era tu sueño? Ya lo tienes, deberías estar feliz de que al fin pudiste dejar todo lo que eras en el pasado, ¿no era eso lo que querías?

-Marco, lo que nosotros... -Me interrumpió.

-¿Por qué quieres traer de vuelta todo lo que teníamos ahora? -Pensé en mi respuesta, pues recordaba lo que había dicho Klopp, pero no me importó. Me arriesgaría.

-¡Porque te amo!

-¡¿Y cuanto tiempo te tomo darte cuenta de eso?! -Su respuesta con tanta rabia en su tono de voz, no era precisamente lo que esperaba.

Quizás estaba esperando más de lo que debería.

-¡Solo déjame explicarte todo!

-¡No! Ya basta, Anne. Ya me has confundido lo suficiente con solo estar aquí. No lo negaré, aun me importas, pero no de la manera que solías hacerlo. Podemos arreglar todo, hasta me gustaría. Pero no volveremos a hacer lo que fuimos, tu te irás de nuevo y ya tuve suficiente. Sé que entre tus sueños y yo, yo soy tu segunda opción, siempre lo he sido y no pienso intentar cambiar eso ahora, no quiero.

Baje la cabeza mientras cerraba los ojos, sentía un nudo en mi garganta y sabía que lloraría en cualquier momento, pero debía evitarlo lo más que pudiera, aunque hasta respirar se me estaba haciendo difícil.

-Desearía que no te fueras rendido con lo nuestro. Y no te mentire, aun te quiero. -Sentí su mano en la parte trasera de mi cuello, su voz era más baja, más calmada.- Pero eso no es suficiente. -Dejo un beso en mi cabeza que tardó más de lo que esperaba y me soltó para salir de la oficina, esta vez no había nadie para impedírselo.

Abrí mis ojos sintiendo las primeras lágrimas deslizarse por mis mejillas. Todo esto era mi culpa.

¿De que había servido irme a Londres, si no era feliz con lo que había logrado?

Debí hacerle caso a Patrick, esto era un error. Sólo tenía que hacer mi trabajo, dejando a Marco de lado. Él no me necesitaba en su vida.

Lo peor es que ya no podía irme, había cancelado todos mis planes en LA, Maddison, Hannah y Robb, deben estar en diferentes aviones, sus vacaciones al igual que las mías, al fin habían comenzado y yo había decidido quedarme en Dortmund.

¿Haría algo bien?

Limpie mi rostro y me decidí que lo mejor era irme de ahí.

Estaba cansada.

«Se fuerte.»

Salí de la oficina y lo primero que hice fue chocar con Erik. Lo miré y tenía una sonrisa tímida, pero la borró al verme.

-¿Estás bien?

-Si, yo... ¿escucharon algo? -Señalé la puerta a nuestro lado.

-No, nos fuimos después de que Marco nos cerrará la puerta en la cara, ¿por qué?

-No, nada. -Sonreí.- Debo irme, Erik. Espero verte pronto.

-Sobre eso, el resto se pregunta ¿quisieras ir a una fiesta el sábado? -Pasó una mano por su cabello.- Será algo tranquilo en casa de Mats.

-Me encantaría, pero lo siento. -Negué.

-No, no te preocupes. Debí suponer que saldrías con Marco, ya que él tampoco irá y... -Lo interrumpí.

-Salir con Marco es lo último que haría, ¿sabes qué? Iré a la fiesta, dime la dirección de Mats.

Si iba a quedarme en Dortmund, haría que valiera la pena. Con Marco o sin él.