Long Way Home - Marco Reus. {Editando}

Capítulo 13.

"Jealousy keeps containing me, in time you'll see just what we could be, but I'm always too late."

-¿Lista?

-Si.

-Ahora con sinceridad, ¿lista?

-No.

Llevé ambas manos a mí rostro, pero Hannah lo impidió. No quería que arruinará su trabajo. Me lo había dejado claro.

Sólo esa puerta me separaba de estar frente a Marco de nuevo.

-Vamos, no podemos demorarnos más.

Maddison empujó la puerta y se apartó para que yo pasara, esta vez no había nadie para recibirnos así que fue más incómodo soportar las miradas de todos. Miré a mis acompañantes sin saber que hacer. Estaba nerviosa. Yo no debería estar aquí, no tenía nada que hacer con estas personas, solo era un capricho de Patrick.

Se acercó un señor indicándonos a donde debíamos ir, en el camino fui saludando a las personas que había conocido en la cena de la fundación y fui presentada a algunos jugadores. No lo voy a negar, me gustaba el fútbol y muy orgullosa apoyaba al BvB, así que tenerlos frente a mí, me hacía pensar las cosas dos veces.

Cuando al fin llegamos a nuestro lugar, miré a Maddison con la boca abierta. Ahí estaba Mats Hummels.

No tarde mucho en hablar con él, era muy amigable y divertido, todo lo contrario a cuando lo ves jugar. Y su novia Cathy ni se diga.

Me había olvidado por completo de mis preocupaciones, pero todo lo bueno termina.

Jürgen Klopp se acercó para saludar, entendía porque la gente decía que era como el padre de estos chicos, porque desde que lo conocí había sentido esa seguridad paterna que no tuve. Era extraño.

En medio de la conversación de lo mucho que me gustaba el club, le hizo señas a alguien, más no le presté atención, hasta que ese alguien llegó a su lado.

Mi sonrisa continuó, solo que ahora era forzada. Él saludó a todos hasta que toda su atención fue hacía mi. Me miró de arriba a abajo sin disimular. Hannah debe estar feliz.

-Reus, no se si tuviste la oportunidad antes, pero te presento a Annette Giesler. Es nuestra invitada especial esta noche.

Si supieras Klopp.

Marco estiró su brazo con una sonrisa de superioridad en el rostro, me tomó unos segundos procesar todo. Imité su acción.

-Me temo que no, Klopp. Es un placer señorita Giesler, soy Marco Reus.

Traté de ignorar lo que sentí al tocar su mano de nuevo, traté de ignorar su actitud, traté de ignorar los recuerdos, traté de ignorar el dolor en mi pecho.

-El placer es todo mío, señor Reus. No sabe cuanto esperé por este momento.

No sé de dónde habían salido mis palabras con tanta seguridad, pero estaba orgullosa.

Su sonrisa vaciló por un momento, pero había que conocerlo muy bien para notarlo.

Tal como yo lo hacía.

-Me gustaría quedarme un poco más, pero me necesitan por allá. Espero volver a verla. -Me guiñó un ojo. Si hace un par de minutos estaba nerviosa, ahora solo quería golpearlo. Cínico.- Mats, quiero hablar contigo luego. -El chico a mí lado asintió.- Qué pasen buena noche.- Palmeó el el hombro de Klopp un par de veces y se fue.

Me fue imposible no seguirlo con la mirada, pero me arrepentí cuando lo vi llegar a su mesa y abrazar a una chica que al parecer era su acompañante.

No podía distinguirla, pero sabía que la había visto antes.

Recordé lo que había visto en algunas revistas, lo que Patrick me había comentado. Al parecer era ella.

Y no podía dejar de pensar en que ella, podría ser yo.

Pero era demasiado tarde.