Nights Without Moonlight

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A menudo, vivimos con situaciones que nos hacen sentir culpables, ya sea religiosa o moralmente. Provocando una inestabilidad en nuestra conciencia

La culpa es una relación ética y psicológica entre el sujeto y su conducta; y en algunas ocasiones, esta sensación de culpa es una emoción infundada o exagerada... incluso enfermiza

Se siente una preocupación constante. Manteniéndonos alerta por posibles peligros que supongan una extinción vital individual

Comienza la inquietud, nerviosismo, preocupación, temor o pánico por lo que está a punto de ocurrir o puede ocurrir... cayendo en la paranoia... despertando emociones que no logramos entender y reprimimos ignorándolas, o bien, nos perturban más.

Tarde o temprano éstas se presentan, sobre todo a aquellos deseosos de experimentar algo nuevo y que finalmente conducen a la locura

-Entonces, Catalyn Lehnsherr quiere regresar a la maternidad

Hiram se adentraba en el auto, estacionado en la parte trasera del club de Magnus Norton.

Observaba a través del espejo su antifaz, basado en Rothbart de "El lago de los cisnes"

-Fue lo que Selina le dijo a Norton-. Respondió MacBride con ambas manos sobre el volante

-Debe ser un viaje largo, desde Londres

-Mis fuentes indican que sigue allá. De igual manera puedo ir a investigarla

Él asintió. Si Catalyn Lehnsherr estaba dispuesta a volver, debía salir del pueblo lo antes posible

-Quiero información en tiempo real, paga lo que necesites y cárgalo a mi cuenta.

-Si, señor.

MacBride arrancó el auto. Lodge se quitó el antifaz y lo observó por unos segundos, recordando la imagen de Selina quién no lo reconoció tras él.

Tenía su aroma grabado. Era fresco y sereno, cómo el de una pradera

Los cabellos que le caían alrededor de la espalda estaban rizados y se veían con destellos claros por las luces que iluminaban el lugar

Tenía un pequeño lunar en el pómulo derecho, que solamente se distinguía si estabas muy cerca de ella

Negó, redimiendo los pensamientos de su cabeza. La joven de alguna manera era coqueta y eso era algo que comenzaba a preocuparle. Tal vez cometió un error acercándose a ella

No se hizo más preguntas. Las respuestas solían atemorizarle más que cualquier otra cosa

-El bien y el mal... son dos cosas opuestas, pero con muchos matices y una delgada línea entre ellos... La misma línea que hay entre el cielo y el infierno. Desde que somos pequeños, nos muestran lo que debemos hacer y lo qué no. Cómo niños, hacemos lo segundo por curiosidad y con inocencia, Cómo adultos, lo hacemos por dos cosas: Amor u Odio. No hay ninguna otra explicación. Sin embargo, las consecuencias siempre vienen, en la religión después de la muerte y en la filosofía, antes de ella. ¿En qué momento realmente repercuten nuestras acciones, contra nosotros mismos?

Caminaba entre los lugares en busca de una respuesta, Un chico de apariencia delgada y cabello largo recogido hacia atrás en una coleta le respondió.

-Debe ser un poco de ambas-. Afirmó, gesticulando. – No debe haber tranquilidad en la muerte de quién vivió haciendo daño

Hiram asintió con un desinterés nefasto. La tensión y la ansiedad en él se acrecentaba y no pudo evitar dirigirle la atención a ella, que lucía desfavorablemente pálida y hasta enferma, alertándolo.