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La veía sentada desde el escritorio, con las piernas cruzadas y sus clásicos labios rojos. Momentáneamente, cuándo todos estaban distraídos ella dirigía la mirada hasta él y le sonreía.

Haberla besado aquella noche pudo haber sido un error, pensaba. Pero también intentaba convencerse a sí mismo de que fue una estrategia para silenciarla y qué no comenzara a investigar por su cuenta

Ignoraba el hecho de que también había cedido a sus impulsos más oscuros.

Podía estar arriesgándose más de lo que imaginaba, estando con ella, sin embargo, necesitaba sólo un poco más de tiempo.

Aquella tarde, mientras las gotas de lluvia golpeaban su ventana, ella entró a su oficina

- ¿Estamos solos?

-Por ahora sí

Cerró la puerta tras de sí. Lodge apiló los papeles en el escritorio hacia un lado.

-Tenía ganas de verlo

Llevaba un vestido color garnet con un par de tiras que se cruzaban en su espalda, ligeramente bronceada

-También yo, pero, sabes que no podemos. No aquí

-Entonces en otro lugar. Podría ser en mi casa.

Levantó la mirada lentamente hasta ella con extrañeza...

- ¿Tu madre sigue en Londres? -. Cruzó los brazos, manteniendo los pulgares arriba.

-Sí, ella había dicho que vendría, pero me canceló la otra noche. Dijo que tenía asuntos sin resolver

-No creo que sea correcto de mi parte ir-. Titubeo. Ella se había sentado frente a él y notó sus piernas largas, a pesar de que no era muy alta. - No sé qué te haría

Ella rio por lo bajo, coqueteando con sus encantadores ojos que eran una mezcla de tonos rojos con reflejos azules

-Si me lo pregunta, tengo un par de ideas-. Arqueó una ceja, provocando una sonrisa en él

-Aún no es tiempo. Tenemos un acuerdo

-Lo sé, pero nunca hablamos y quisiera más de esto

-Podría verte mañana por la noche... pero no en tu casa, ni en la mía. Debe haber otro lugar

Ella se llevó la mano a la cabeza, pensativa

- ¿Conoce las rocas, al lado del lago?

-E pasado por allí

-Solía ir cuándo murió mi padre porqué con mi mamá en casa, necesitaba un lugar para estar sola

- ¿No prefería estar acompañada? Las situaciones así son peores en solitario

-Mi madre siempre tomó conductas que yo no entendía. Especialmente después de eso

-Eres muy joven. Aún no entiendes algunas cosas

Asintió con una sonrisa melancólica. Entonces se puso de pie

- ¿Lo veré mañana?

-Sí. Saliendo de aquí

-Me parece bien. Hasta entonces-. Le besó la mejilla y él se relamió los labios, mirándola retirarse

-Hasta mañana

-Por cierto...-. justo cuando salía por la puerta, se detuvo en seco y se viró hacia él. -¿Cómo supo que mi madre estaba en Londres?

Sintió su sangre subir, y, aun así, en medio de una risa nerviosa mantuvo la mirada fija

-Lo mencionaste antes

-No lo recuerdo

-Estoy seguro de que sí. De lo contrario ¿Cómo podría saberlo?

Estaban yendo tan rápido y apenas era el principio, pensaba ella. Por más cliché que sonase el romance con un hombre mayor representado cómo una autoridad, no siempre es lo que se deja ver. Se simboliza normalmente cómo un amor en secreto, pero siempre hay detrás un aspecto psicológico que desencadena la atracción, y bien, el deseo por lo prohibido y lo excitante que puede resultar.

Más allá de lo romántico puede ser extenuante y enloquecedor.

Y Selina se preguntaba en qué momento comenzaba a sentirse así. Recordaba la primera vez que lo vio. Se había dirigido un breve vistazo antes de que hablara con ella... sin embargo no se sintió como amor a primera vista ¿Era así cómo realmente debía sentirse? ¿O no existía?

Existe un área del cerebro, localizada en el lóbulo frontal y que nos permite establecer en milisegundos si una persona es atractiva o no. Y a pesar de ser un corto período de tiempo, esta percepción no cambia a largo plazo, demostrando que la primera impresión definitivamente cuenta.

Ni siquiera recordaba si le pareció atrayente. Sin embargo, la intriga que había despertado él en ella fue quizá la clave principal para incentivar sus sentimientos

-Dios, te estaba buscando-. Clarissa la tomó del hombro, besándole la mejilla

-Fui a la biblioteca, ¿Nos vamos?

-Escucha, hay una fiesta en casa de Claire Rivers en la noche. Seth estará allí

Selina hizo un gesto de desaprobación, riendo

-Llevabas casi un año sin mencionarlo, después de hablar sobre él durante tres años, todos los días

-Han pasado un par de cosas y a veces prefiero tu versión alcohólica. ¿Qué dices si vamos y coqueteas un poco con Malarkey? O con alguien que sea menos imbécil

-Solamente iré a evitar que te desnudes en las escaleras-. Le guiñó un ojo

- ¿Dónde está lo divertido en eso? Coquetea con un par de chicos y elige al menos uno

Ella negó con una sonrisa mientras la miraba aplicarse un poco de lápiz labial

-No me interesan los chicos por ahora

-Entonces con un par de chicas-. Le propinó un leve codazo, y ella se encogió de hombros. -Si lo haces por Daniel, tienes que superarlo. Ya pasó casi 1 año

-No es eso, pero quizá ya conocí a alguien-. Respondió en seco, Clary le clavó la mirada

-De ser así me lo habrías dicho

- ¿No puedo guardar un par de secretos para mí sola? -. Entrelazó los dedos en sus labios, arqueando una ceja.

Nights Without MoonlightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora