—¡Dude!—. Volteo rápidamente era Trevor. Traía gafas obscuras. Sonrió al verlo y choco mi mano con la de él para después darle un abrazo. No entiendo las visitas tan repentinas de hoy.
¿Realmente la fiesta de anoche fue un total fracaso? Siento que todos han venido a verme por lastima, no porque estén preocupados por mi. Holy, suele ser demasiado liberal, por algo hemos tenido los problemas que hemos tenido.
—Esto es para que te vaya súper bien mañana y qué no te ganen los nervios. Menciona mi compañera de baile. Al parecer ella planeo que vinieran a darme ánimos para este fin—. y por favor no tomes hoy—. Mis amigos ríen con ese comentario, pero mi vista se enfoca en el gesto de Trevor. Ha cambiado inmediatamente, volteo y veo que era Venus a quien miraba.
Sentí una presión en mi pecho, no voy a negarlo, sentí demasiados celos. Venus tenía su cabello recogido con un lapicero, mientras escribía en el iPad, toda mi agenda y reservas. Tenía una sudadera holgada que le quedaba muy bien. Dando un reflejo relajado ante los demás. Sus ojos estaban perdidos en aquella pantalla y pude observar cómo mordía su labio inferior con delicadeza. Un mechón rebelde se ha escapado del agarre de su peinado, cubriendo un poco su vista, vi como pasa ese mechón detrás de su oído con mucha suavidad y elegancia.
—Es ella—. Lo miro rápidamente—. Ella es la chica de la cual Pearce me hablo, quedo fascinado con ella, además esa chica baila increíble—. Saca su teléfono y se mete rápidamente a la fototeca para poner un video que tenía en galería—. Me lo paso ayer por AirDrop.
Tome su teléfono y era el video de Venus bailando en las telas. Alce la vista y vi que seguía escribiendo unos documentos digitales.
—Vaya es buena—. Dice Meg tomando el teléfono—¿ella es artista?—. Cuestiona y lo volteo a verlo con seriedad. ¿Solamente por aquellos pasos de baile se ha enamorado? No la conoce como yo.
—No lo se, pero lo batearon ayer—. Sonreí por mis adentros al recordar un poco aquella escena. Me da una palmada en mi espalda—. ¿Me la presentas?—. Mi sonrisa desaparece nuevamente para verlo con algo de enojo. Sonríe y le quita su teléfono a Meg para darle nuevamente play.
—Quisiera, pero tenemos muchas cosas que hacer. Es mi ayudante y...—.
—Ah, con razón ahora todo tiene sentido—¿De qué me perdí?.
—Milo—. Todos volteamos era Venus. Meg y Trevor la saludan con un ademán y ella les devuelve el gestó con una sonrisa, siento como me jalan del hombro y veo cómo Trevor camina para acercarse a ella. Así que voy atrás de él.
—¡Venus! Preciosa—. La saluda de beso, ruedo los ojos y trotó para llegar más rápido.
—¿Qué pasó Venus?—. No deje que expresara ninguna palabra. Ella le sonríe a Trevor y me entrega el iPad.
—Pudieron modificarte las horas de ensayo, solo necesito que los cheques y firmes —. Tomo la tabla y miro a Trevor para después ver la pantalla.
No paraba de sonreírle, además se supone que no tenía mucho que había terminado con su novia, ¿acaso estaba demente? ¿Acaso quería que Venus le diera una bofetada? Claramente no lo haría. Venus, no es nada su tipo, su tipo son rubias, delgadas, atletas, deportivas y elegantes ¡todo lo contrario a ella!
—Trabajas para Milo—. La veo de reojo y se acomoda el flequillo, colocando una amplia sonrisa.
—SI, pero solo hasta que su madre mejore—. Firmó y le entregó las cosas, ella las toma y se agacha por su bolsa.
—Yo buscó asistente—. Miré a Trevor con el ceño fruncido.
—¿De verdad?—. Expresamos todos al unísono el ríe y se acerca a ella abrazándola de un costado, pero yo lo jaló del cuello de su camiseta y lo veo con seriedad.
—Por qué no hablas con ella cuando ya esté desocupada ahorita tenemos que ir a ver a mi madre y hace mucho no la vemos—. Venus me mira con el ceño fruncido—. Además tiene que entregar algunas cosas del trabajó que le urgen a mi madre y tenemos que ir a pruebas de vestuario hoy y gracias por venir, me dieron muchos ánimos ¡nos vamos Venus! —. Exprese lo último con rapidez
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Cuando la tierra conoce a Venus y Colapso (Milo Manheim)
Espiritual✨Ella no sabe quien es, desconoce su origen. No confía en nadie más, ni siquiera confía en ella misma. Le cuesta mucho salir de aquella zona de confort. Sus problemas la hacen sentirse mal consigo misma, desconfiando de sus capacidades. No confía...