La castaña lo voltea a mirar con sus labios fruncidos, confundida y molesta.
-¿Quién es ella?-
El pelinegro suspira, girando su cabeza para ver, a lo lejos, la chica que reía y saltaba por todo el lugar.
-Ella es Dagger...la que lo cambió todo-
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Todos corrían sin parar, sus piernas se movían de una manera tan rápida y desesperada que hasta ellos mismos se sorprendían la velocidad que alcanzaban.
Pero ahora, en estos momentos, no había lugar para la sorpresa, sino solo para el miedo y adrebalina, gritando mientras corrían despavoridos.
-¡¡NOS ESTÁN ALCANZANDO!!-gritó Dustin, rasgándose la garganta-¡¡SHIT!!-
-¡¡YA DEJA DE CHILLAR!!-le grita Lucas sin parar de correr.
-¡¡A mi no me callas!!-negó Henderson frunciendo sus cejas.
Varios pares de pies corriendo tras ellos estaban a punto de alcanzarlos, unos pocos metros más, y lo que ocurriera podía ser muy feo. Y todos lo sabían.
Hawkins, Indiana. 10 : 14 p.m. 15 minutos antes:
En aquella cafetería en Roma, Camila golpeó la mesa con todas sus fuerzas y las palmas abiertas, haciendo a todos, incluyéndola, desaparecer.
Con sus temblorosas piernas, sus cuerpos cayeron arrodillados de golpe, chocando con el duro pavimento que ahora había bajo ellos.
Camila soltó un jadeo, apenas estabilizada con las palmas de sus manos abiertas en el suelo, y sus rodillas rasgadas por este. Respiró con dificultad, sintiendo un nudo que nunca va a olvidar en su garganta, pulsando y pulsando con fuerza.
-Ca-Camila-, un débil susurró fue lo que escuchó antes de que alguien colocara a una ma o en su espalda. Mike, arrodillado a su lado, la miraba con preocupación.
-¿Todos están bien?-murmura esta con una temblorosa voz, aún mirando abajo, con todo el rostro cubierto por su rubia cabellera.
-¿¡Tu estás bien!?-es lo que pregunta Emilia, histérica.
-Yo tengo una mejor: ¿ella está bien?-señaló Charlie asustado. Eleven estaba aún desmayada y toda desparramada en el suelo, con los brazos extendidos. Joyce chilla acercándose al instante.
-E-está desmayada-susurra Camila viendo a la castaña de reojo.
-¿Qué fue lo que pasó?-preguntó Max aún en shock, mirando a su amiga, esta la miró a ella.
-Brenner. Diane. El, todo...todo era una trampa-habló sumida en sus propios pensamientos, confundiendo a los demás.
-¿Estamos en Hawkins otra vez?-murmura Robin parándose y viendo alrededor.
En el pequeño pueblo, contrario a Italia, la luna decoraba el oscuro y estrellado cielo, siendo hace rato denoche en este lado del mundo.
Mientras los demás empezaban a levantarse, Steve soltó un suspiro tomando entre sus brazos al desmayado cuerpo de Eleven, acomodándola entre estos.
