capítulo 64

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- Buenos días cariño- saludó mientras entraba a la cocina- ¿cómo amaneciste?- besó mi frente.

- No me quejo, el brazo no me dió muchas molestías anoche- moví el brazo vendado graciosamente.

- ¿Y tus.. muslos?

- Están mejor, cicatrizando- contesté incómoda.

- Que bien - aclaro su garganta - Paul quería verte.

- Yo no quiero verlo - conteste seca.

- ¿Porqué? Es un gran tipo- dijo con una sonrisa.

- No me agrada, es todo -hice una mueca.

Suspiró- Finn llamó, dijo que quería venir a visitarte.

- ¿A qué hora?- pregunté comiendo una cucharada de cereal.

- Creo que en unas horas.

- Bien- seguí desayunando mientras mi tía solo asentía y se retiraba de la cocina.

Terminé de desayunar, lavé los trastes sucios y subí a mi habitación, quité la venda de mi brazo y me metí al cuarto de baño a darme una ducha. Al terminar me sequé, me puse un pantalón ajustado, una suéter blanco y mis tennis, el pantalón ya no me lastimaba los muslos, justo en el momento que terminaba de enrollar la venda en mi brazo de nuevo tocaron el timbre. Bajé y al abrir la puerta me encontré con uno de mis mejores amigos.

- Hola, pequeña pera- revolvió mi mojado cabello.

- Hola, Finn- reí ligeramente, él vió detenidamente su mano y se limpió lo mojado en su pantalón.

- ¿Me dejarás pasar?

- Claro- me hice a un lado y él paso, cerré la puerta y sorpresivamente me abrazó.

- Te extrañé, _______.

- Y yo a tí, hace mucho que no sabía de ti- lo abracé de vuelta.

- Tengo mucho que contarte- expresó emocionado mientras se separaba de mí- ¿Qué la pasó a tu brazó?

- Larga historia- suspiré- no querrás saberlo.

Durante dos horas me había contado acerca de como pasó el tiempo con su hermano que había regresado de Italia, también que su relación con Mariana prosperaba y que parecía que sus padres se estaban entendiendo mejor.

- ¿Y cómo va tu relación con Schnapp?- preguntó curioso mientras le hacia mala cara- ¿Qué? ¿Dije algo malo?

- No me hables de él- desvié la mirada.

- ¿Porqué? ¿Ahora que pasó?

- Bueno... Digamos que hubo un mal entendido, un mal entendido que pudo haber cambiado nuestras vidas y..- suspiré- digamos que si hubiera pasado él no lo hubiera querido.

- No entiendo- ladeó la cabeza.

- Estuve en el hospital, casi nadie se enteró- suspiré- El doctor dijo que estaba embarazada, Noah dijo que no quería tener un hijo, luego el doctor dijo que se había equivocado...

- ¿Y ese fué todo el asunto?- enarcó una ceja y me ruboricé.

- Creo...

- Es algo tonto enojarse por eso- rodeó los ojos, ¿acaso lee mi mente?

- Pero si hubiera estado embarazada, ¡Nos hubiera abandonado!

- ¿En serio crees eso? Piénsalo, siempre estuvo para ti...

- Pero estuvo conmigo porque quería vengarse de que yo le abollé la moto.

- Independientemente de lo que haya hecho, haya sido venganza o no, siempre estuvo para ti en los buenos como en los malos momentos, solo perdónalo, terminarás perdiéndolo, ¿entiendes?- bajé la mirada- Además siempre que estaba contigo, le notaba un aura más pacífica y un brillo en los ojos- se encogió de hombros.

Mi chico malo (Noah Schnapp y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora