Mi Pequeña Obsesión~[JENLISA] [G!P] (ADAPTACIÓN)

CAPÍTULO 34

Holaa💜 lamento mi ausencia, estos días no tuve muchas ganas de escribir:( pero hoy ya tienen su nuevo capítulo por la motivación que me dio "Sour Candy"🥰...gracias por leer y cuiden mucho su salud💜

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Jennie se puso de pie y me miró, parecía estar muy enojada.
-- Fue la película más horrorosa que he visto en mi vida...y no quiero volver a verla nunca más -- me dijo.
-- No parecía ser así cuando me pedíste que volviera a ponerla -- le sonreí. Sus ojos y boca se abrieron, estaba indignada.
-- No puedo creer que hayas dicho eso.
-- ¡YA BASTA! -- dijo Rosé poniéndose de pie y yo también lo hice -- ¡No entiendo nada de lo que dicen! ¡Y ya me cansaron! ¡Arréglense, peléense o vayan a tener sexo por ahí y así se les quita de una vez lo insoportable que están!
Se fue, dejándonos solas y apreté los puños ante lo último que dijo, si supiera que ese el puto problema.
-- Quiero que te mantengas alejada de mí, porque si no es así, te arrepentirás ¿me escuchaste?.
-- Solo dime una cosa.
-- ¿Quieres saber si lo disfruté? ¿Si lo gocé? Si, si lo hice, eres toda una máquina lujuriosa...pero no quiero volver a repetirlo -- me dijo y comenzó a caminar hacia la salida de la cafetería. Mis piernas tardaron un poco en responder, pero lo hicieron y corrí hasta alcanzarla.
-- Solo quiero saber que demonios te pasa, Jennie -- le dije mientras la tomaba con cuidado de su brazo -- no entiendo porqué actúas de esta manera...
-- ¿Acaso quieres que siga alimentando tu ego? -- me preguntó y soltó un irónica risa -- ya está Manoban, lograste conseguir lo que querías de mí ¡me acosté contigo! ¡Felicitaciones, un aplauso para la señorita! -- elevó un poco la voz y aplaudió -- ¿Ahora qué quieres?
-- Yo, yo...no lo sé -- dije aturdida por sus palabras.
-- ¿Que venga la siguiente, verdad? -- respondió -- así es como funciona y yo no pretendo intentar cambiar eso.
-- Solo quiero estar bien contigo, Jennie -- le dije soltando un suspiro.
-- Está bien, está bien, aquí no pasó nada...no más peleas, enredos, ni vueltas, solo no sigas...olvídalo, yo ya lo olvidé -- me dijo.
-- Pero si pasó y yo...no quiero olvidarlo...no puedo -- dije bajando la voz con cada palabra.
-- ¿Y qué quieres que haga? -- preguntó. Sus ojos se humedecieron y sentí un presión en el pecho -- ¿Qué me acueste contigo cada vez que tengas ganas?
Apartó su mirada hacía el suelo. El nudo que se formó en mi garganta no me dejaba hablar, hasta me costaba tragar. Con algo de duda me acerqué y tomé su rostro para hacer que me mirara. Sus ojos estaban cristalinos y vidriosos.
-- Para ser honesta...eso me haría muy feliz -- una lágrima logró escapar de sus ojos y resbaló por su mejilla. Sentí por dentro como me destrozaba esa imagen. Con mi pulgar la sequé delicadamente -- Pero jamás te pediría algo así.
-- Ya no sigas Lisa...aunque no lo parezca, me haces daño.
-- No quiero hacerte daño...
-- Entonces...ya déjame, por favor -- me pidió y comenzó a alejarse, hasta estar lo suficientemente lejos de mí, para darse la vuelta e irse, mientras yo solo la miraba.
Ya intenté dejarte centenares de veces Jennie, y cada vez encuentro una mejor manera para fallar, soy una maldita egoísta.
El resto del día se me hizo lento y pesado. No volví a ver a Jennie por ningún lado, ni a Rosé, ni a Dahyun.
Momo dijo que Dahyun se había ido porque tenía asuntos con su madre.

Llegué a mi departamento y tiré las llaves en la mesa de centro para luego ir al baño. Me duché y luego me acosté en el sillón. Prendí en televisor pero sentí voces desde el exterior y luego el sonido de una llaves en la puerta, rápidamente apagué la TV y me escondí detrás del sillón. Era Rosé pero no venía sola.
-- Que cansada estoy -- esa era mi prima.
-- Si, hoy fue un día agotador -- le contestó Dahyun. Me acomodé mejor para que no pudieran verme.
-- ¿Quieres algo para beber? -- le preguntó Rosé.
-- Un poco de agua, por favor.
Escuché como se movían las sillas que rodeaban la mesa de mármol de la cocina.
-- Ya sé porqué Jen estaba tan tensa hoy -- habló Rosé.
-- ¿Por qué era?.
-- Anoche Lisa fue a su casa y bueno, entre ellas...tú sabes.
-- ¿Qué?.
-- Que entre ellas hay mucha química.
-- Bueno sí, se nota a kilómetros.
-- Exacto, por eso anoche terminaron haciéndolo.
-- No, no te creo.
-- Tarde o temprano iba a pasar, yo lo sabía pero no creí que la afectaría tanto. -- continuó mi prima.
-- ¿Le afectó?.
-- Si, a Jennie le pasa algo con Lisa...aunque me lo niegue rotundamente, sé que es así. Está asustada...imagínate se enamoró de Kai, él cual, sin aparentarlo, era un idiota en potencia, ¿y ahora Lisa?. Está bien, es mi prima y la adoro, pero es tan cínicamente idiota y mujeriega. No hay que ser un genio para saber que la terminará engañando.
¡Maldita sea! La única chica la cual...bueno, no amo...tal vez... NO, definitivamente no la amo, pero si me importa, demasiado, lo que piense de mí, no quiere tener nada conmigo sin siquiera antes haberlo intentado.
-- La conozco muy bien, se deja ver como una chica fuerte y decidida, tiene un carácter especial y admiro demasiado sus convicciones inamovibles, pero...cuando logras entrar en su mundo puedes ver lo frágil y sensible que es -- agregó Rosé.
-- Es una pena porque Jennie es tan buena, una excelente chica -- comentó Dahyun -- debemos hacer algo al respecto.
-- ¡Sí! Eso mismo estaba pensando...
-- ¡Debemos encontrarle a alguien! -- dijeron ambas al mismo tiempo.
-- Y yo ya tengo a alguien en mente -- agregó mi prima.
-- ¿Quién?
-- Kim Taehyung -- sentenció. ¿Es una puta broma?
-- ¿Taehyung? ¿El presidente del Centro de estudiantes?
-- Ese mismo.
--¿Lo conoces? -- preguntó algo asombrada Dahyun.
-- Sin querer choqué con él el otro día, fue muy amable y para nada se comportó como un baboso.
Tal vez no se comportó como un baboso porque la vibra homosexual que da es increíble, primita. Sentí molestia ante el alardeo que hacía del extraño al cuál le entregarían a Jennie en bandeja.
-- ¿Crees que le guste a Jennie? -- Preguntó la chica de anteojos.
-- Conociéndola, puede que sí.
¡Genial! Ahora ni en mi propia prima puedo confiar. Gracias por esas ideas Roseanne, mi adorada prima, un amor...veamos como estarás ahora que dormirás en el maldito sofá.
-- No creo que LISA te lo agradezca -- dijo Dahyun remarcando mi nombre.
-- Esto lo hago por el bien de MI mejor amiga -- le respondió la otra -- ¿Verdad que lo entiendes, Lisa? -- me preguntó. Espera...¿qué?.
Me quedé congelada esperando a que esto no estuviera pasando realmente. Lentamente me puse de pie, no podía seguir ahí si ellas ya me habían descubierto.
-- ¿Desde cuándo saben que estaba aquí? -- les pregunté.
-- Desde que te quejaste cuando dije el nombre de Taehyung -- me respondió Rosé.
-- Que lindo lo que hacen, primita. Entregarle en bandeja a Jennie a un completo extraño -- le dije con tono molesto.
-- ¿Y qué quieres que haga? ¿Qué deje que TÚ la dañes? Olvídalo.
-- No te atrevas a arruinar esto, Lisa -- me amenazó la pequeña rubia -- si todo sale bien, es lo mejor para Jen -- ¿Acaso no piensas en mi, pequeña demonio? -- Y no, no estoy pensando en ti, pequeña mujeriega.
¿Cómo sabía lo que yo había pensado?
-- ¿Cómo lo supo? -- habló mi prima -- fácil primita, estamos leyendo tu mente...BUUUUU -- se acercó un poco -- no hay que ser una genia, eres tan predecible...
-- Hubiera preferido que dijeras que solo leías mi mente -- la miré mal.
-- Como sea, volviendo a lo importante -- miró a Dahyun -- Tenemos que hacer que Jen y Taehyung se encuentren.
-- ¿Pero cómo? -- preguntó.
-- Si ¿Cómo? -- le pregunté molesta.
-- ¿Sabes si va seguido a la biblioteca? -- le siguió hablando a la pequeña rubia.
-- Si, siempre lo veo ahí -- le respondió -- ¿sabías que le enseña a leer a niños ciegos?
-- ¿¡De verdad!? Oh es taaan tierno -- exclamó mi traicionera prima.
-- Ustedes dos son unas malditas traidoras -- las acusé y ambas me miraron despectivamente.
-- Si no quieres escuchar entonces vete -- me dijo Rosé.
-- Si, molestas -- agregó la otra.
-- ¿Sabes qué pequeña diabólica? Calladita te ves más bonita -- le dije. Ella me sacó la lengua y volvió su vista a mi prima. Comenzaron a hablar en voz baja, impidiéndome escucharlas. De ninguna manera dejaré que Jennie y Taehyung tengan una cita o algo así.
Me tiré en el sillón y prendí la TV para intentar concentrarme en otra cosa. Ellas reían y conversaban muy animadamente. Las ganas de saber lo que planeaban me carcomían.

¿Qué pasa si a Jennie le gusta?

¿Qué pasa si acepta salir con él?

¿Qué pasa si a él le gusta ella?

¿Qué pasa si me meto en el medio?

Sonreí maliciosamente ante mi idea de frustrar cualquier plan que involucre a Jennie y otra persona.

-- ¿Por qué sonríes? -- Rosé me sacó de mis pensamientos. Me senté cómodamente.
-- Por nada.
-- Conozco esa sonrisa, es la que pones cuando tu mente planea algo macabro, como cuando...quieres arruinar algo.
-- ¿Por qué piensas eso de mí?
-- Bueno, no lo sé, tal vez sea porque TE CONOZCO Lalisa.
-- O porque eres predecible -- comentó Dahyun.
-- No chicas, están muy equivocadas -- me puse de pie y me acerqué a ellas. Coloqué una mano en el hombro de Dahyun -- Pero ¿saben qué? En una si cosa tienen razón, es sobre lo que hablaban, así que si necesitan mi ayuda para lograr que Taehyung salga con Jennie, no duden en pedírmela que haré todo lo posible...

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