Capítulo 3

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POV Poché

Ontario, Canadá. - 1 semana después.

Hace una semana que llegamos a Canadá, Alexa se lo tomo mejor de lo que me esperaba. Hoy empieza la escuela y espero que aquí si se comporte bien, en la tarde tenemos la cita con la psicóloga, ojalá y nos ayude. Me dirijo a su habitación para despertarla.

- Alexa, es hora de ir a la escuela cariño. - Le digo acariciandole el cabello. Ella se remueve.

- Buenos días mamá. - Me dice bostezando y me da una sonrisa.

- Buenos días pequeña, lista para la escuela?

- Sí, además que mi mami me fue a visitar en mis sueños, me cantó como siempre lo hacía en las mañanas, y tu estabas ahí cantando también. - Dice alegremente y yo trato de fingir una sonrisa, hablar de Abi con Alexa no me resulta fácil. - Me podrías cantar ahora tú mamá? - Pregunta y yo me paralizo.

- Ehm, cariño ya es tarde.. mejor alistate para la escuela, sí? Te prepararé unos waffles para desayunar. - Le digo y ella baja la cabeza y su expresión facial se torna triste.

- Sí... ya salgo. - Dice y se encamina al baño con su mirada triste. Yo respiro y contengo las ganas de llorar. Quisiera que las cosas entre mi hija y yo fueran diferentes, quisiera que Abi no fuese muerto, quisiera tantas cosas que desgraciadamente no me permiten tener...

George S Henry Academy.

- Espero te portes muy bien cariño, nos vemos a la salida, sí? Y por favor no me causes problemas Alexa, es una escuela nueva y no quiero que se repitan los mismos errores que en Miami. - Le digo, ella rueda los ojos.

- Si mamá, trataré. - Dice bajándose del auto.

- Y recuerda que luego de la escuela tenemos que ir con la psicóloga, ok?

- Sí. - Dice y se despide de nuestro chófer con un abrazo. - Adiós. - Me dice a mi, esperaba un abrazo al menos, pero bueno.. sus actitudes que aún sigo sin comprender.

•••••

- Buenos días señora Garzón. - Me dicen todos los trabajadores al verme llegar, los siento intimidados con mi presencia, ando vestida con un traje negro con gris de 2 piezas, y por supuesto mis infaltables lentes oscuros.

- Buenos días. - Les respondo y a lo lejos veo a Kim acomodándose en su nuevo escritorio, obvio no podía dejar a la mejor secretaria que he tenido botada.. así que le pedí que se viniera conmigo, ella aceptó siempre y cuando su familia pudiera venir también, así que ahora se encuentra viviendo en Canadá con su esposo e hijo pequeño.

- Buenos días señora Garzón, está lista para empezar con la agenda de hoy? - Dice con su típico entusiasmo.

- Buenos días Kim, por supuesto que sí, vamos a revisar mis pendientes.

- Tiene una reunión de bienvenida con el comité, luego un almuerzo con la federación canadiense, y a las 6pm una reunión con una señorita muy influyente aquí en Canadá, necesita una entrevista suya.. no sé si cancelarla o no, porque justo le coincide con la cita psicológica de la niña. - Demonios... no puedo dejar pasar esa entrevista, pero tampoco puedo dejar de acompañar a Alexandra a su cita.

- Kim trabajo es trabajo, así que dejaré a Alexa en su consulta y luego regreso a la entrevista. - Digo segura de mi decisión.

- Bueno, si usted lo dice.. así será, me retiro a organizar sus reuniones de la próxima semana, con permiso. - Finaliza y se retira.. siento que Kim no está muy contenta con mi decisión, pero no me importa la verdad.

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