I hate u, but I luv u (Hero Fiennes) [PAUSADA POR EL MOMENTO]

Capítulo 36

Narra Hayden

Después de que se fuera Hero, me levanté del suelo con cuidado. No recordaba que tenía tanta fuerza. Habían pasado tantos años que su fuerza había aumentado y del golpe, recordé que de adolescente ya tenía bastante fuerza. De hecho, era el que más fuerza tenía de mis socios y empleados.

Al levantarme, vi en un espejo que estaba colgado al final de un pasillo como mi labio sangraba. Antes de levantarme ya notaba un  sabor metálico en mi boca, pero no pensé que sería nada serio. Me equivoqué. De un golpe me rompió el labio. Joder con el Fiennes, si que me dio con ganas. Escupí la sangre que tenía en la boca y enseguida fui al baño. Allí, cogí el botiquín y con cuidado empecé a curarme el labio. Primero me lavé la boca con un poco de agua y me heché agua oxigenada en la herida para desinfectarla. Solté un par de insultos por el escozor y el dolor que sentía con cuidado, me puse un par de puntos. No era muy grande, pero debía coserlo, no podía dejarlo así, tardaría más en curarse y tendría más posibilidades de que se infectara. Guardé el botiquín y salí del baño encontrándome con Izán. Él comenzó a trabajar para mí mucho antes que Hero y en la actualidad, aún continúa haciéndolo. Se ha convertido al largo del tiempo en un hermano para mí. Siempre me esta protegiendo y yo a él obviamente.

-Bro estás bien?-Al estar delante, me tocó la herida y yo me quejé-perdona

-No pasa nada, estoy bien-sonreí leve para que no se preocupara-

-No se como ha tenido huevos de venir aqui-ambos empezamos a caminar para ir a la planta de arriba-

-Ya no es un niño, es un adulto. Nosotros le hemos vuelto así-le dije abriendo la puerta de nuestra habitación. Ambos dormiamos juntos, pero cada uno en su cama-

-En eso tienes razón-Izán se sentó en su cama y yo en la mía, quedando uno al frente del otro-

-me quedé pensativo mirando al suelo- mañana iremos a hablar con él

-Aviso a alguien?-dijo mirándome-

-No

-No? Cómo que no?-Izán me miró dudoso-siempre vamos bastantes

-Solo iremos tu y yo-me acosté y me quedé mirando al techo-

-No te reconozco-se levantó y puso una mano en mi frente-tienes fiebre? Dónde está mi hermano-

-ambos reímos y quité su mano de mi frente-seré narcotraficante, pero igual tengo corazón. Sólo hacía lo que me mandan. En el fondo me sabe mal haber pegado a Cameron aunque no lo parezca, pero ya tengo el dinero. Mañana hablaremos con Hero

-No querías pegar a esa chica? Cada vez me estás sorprendiendo más

-Con quien trabajamos ahora es mucho más chungo que nosotros. El dinero que le prestamos a Cameron era suyo, no mío. Y pues vosotros hicisteis el trabajo sucio-dije asintiendo-mañana le devolveré de mi bolsillo el dinero

-Joder bro...Jamás había visto este lado de tí-dijo riendo Izán sorprendido-

-Has visto? Si soy todo un oso amoroso-dije y ambos empezamos a reír de lo que dije-te apetece un porro?

-Encantado osito-me sacó la lengua haciéndome burla-

-Cuidadito con lo que dices Izán-reí y le pegué una colleja leve-

El menor se disculpó y me abrazó. En el fondo el también era un osito amoroso. Entendía que se sorprendiera pues siempre me ha visto enfadado y serio. Jamás me ha visto llorar o ver mi faceta buena. Solo me dedicaba principalmente a mi trabajo, llegando a veces al punto de descuidar mi salud, pero él siempre estaba ahí para que reaccionara y para ayudarme claro está. A pesar de ser un yonkie como yo, también somos seres humanos y tenemos amor que dar y también tenemos derecho de recibirlo claro está. Volviendo al tema, cogí papel de liar, unas boquillas, unos trozos de cartón y una mezcla de tabaco y marihuana y nos hice los porros. Los encendí y le di uno a él. Después de eso, mientras nos los fumábamos, encendí el ordenador y tuvimos una reunión virtual con uno de mis socios. Tenía más o menos nuestra misma edad, pero no era de Estados Unidos, sino del continente europeo, concretamente de Francia. Tener esta clase de negocios también servía para aprender idiomas. Le confirmé que sus paquetes me habían llegado con éxito. Esta claro que era droga no? Yo también le envié unos paquetes y también le habían llegado. Después de esa pequeña reunión, apagué el ordenador y inmediatamente, ambos nos quedamos dormidos en mi cama.

Un día después...

Me desperté pronto, sobre las seis de la mañana con cuidado. Izán estaba durmiendo y no quería despertarlo. Las demás personas de esta casa también estaban despiertas. Un día más de trabajo. Fui a mi oficina y preparé lo que debía vender cada uno. Poco a poco iban entrando y yo les iba dando lo que debían de vender hoy junto con lo que debían recaudar, no sin antes darles los buenos días. Ante todo, siempre educado. Cuando se fueron todos por su lado, me vestí y desperté a Izán.

-Mm...un poquito más...-se tapó hasta la cabeza con las sabanas y yo reí ante su acto-

-Nonono, arriba que me tienes que ayudar a limpiar la casa y a hacer el inventario-lo destapé y hice que se levantara-

-Joeer-este refunfuñó pero al ver mi mirada paró de golpe-te ayudo te ayudo

-Así me gusta, responsable-reí y le mandé al baño para que se duchara-

Cuando entró, fui a mi oficina y hice una llamada que cierta persona no se esperaba.

-Hola Hero...