✦. LIV

258 45 13
                                        

Deciden irse después de medianoche

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Deciden irse después de medianoche.

El auto que Byeongkwan les da es definitivamente robado, Donghun lo reconoce perfectamente porque como luce como uno.

Ponen sus bolsas en la parte de atrás, Chan decide sentarse allí. Jun va en el asiento de copiloto porque quiere revisar los documentos, así que Donghun termina conduciendo.

Sehyoon y Byeongkwan abrazan a Jun con fuerza y este último susurrando algo en su oído y Junhee asiente. Sehyoon los abraza lánguida y suavemente, casi como un hermano, les desea buena suerte y les dice que siempre serán bienvenidos si deciden regresar.

Entonces se van.

Han estado en la carretera por cuarenta minutos, Junhee pone los documentos en una bolsa de plástico, la cierra y entonces se recuesta en su asiento.

—L.A. —dice entre un suspiro—. No sé hablar inglés, mierda.

—Ni yo —añade Chan, quien luce medio dormido.

—Allí veremos —responde Donghun y se quedan callados.

Luego, Jun ve por su ventana y se enfoca en el espejo lateral.

—¿Saben? Siempre he intentado tener una mente positiva en cuanto a la vida. Siempre —suspira el pelirosa y lanza una carcajada al aire— y, ahora mismo, creo que la mente positiva se puede ir a la mierda.

Donghun frunce el ceño

—¿Qué mierda?

—Hay al menos cinco patrullas policíacas persiguiéndonos.

Chan boquea y mira detrás de su asiento, luego maldice por lo bajo. Donghun mira desde el espejo retrovisor, y, como a la vida le gusta llevarles la contraria, claramente hay algunas patrullas a unos cinco metros de ellos con las luces apagadas.

—¿Qué hacemos? —pregunta el menor, extrañamente calmado—. Probablemente me estén buscando.

—O a mí —Jun se encoge de hombros—, es decir, Imoogi Pa tiene contactos en todas partes, no me sorprendería que me hubiesen detectado en Seúl.

—Quisiera recordarles que yo solía robar autos en esta ciudad y que he tenido acreedores en mi puerta por media década al menos —Donghun suspira apretando el volante—. ¿Quizás es una mezcla de todos nosotros?

—Eso creo.

—Honestamente, estoy intentando tener una mente positiva, pero ¿qué mierda hacemos?

Donghun sostiene el volante con más fuerza, una idea cruza su mente y sonríe emocionado.

—Los perdemos.

Presiona el acelerador y el auto avanza con rapidez. Después de algunos segundos, las sirenas comienzan a inundar el aire.

—Esos malditos se estaban ocultando —Donghun dice entre dientes y arrugando su nariz—. Bien, bien, conozco una salida, nos llevará a la entrada principal cerca del río Han y que tal vez los pierda cuando lleguemos al Wonhyo Bridge.

epoch | dongjunchanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora