Me encuentro en una hamaca en la que me columpio lo más fuerte que puedo, tratando de tocar el cielo con mis pies. Siento que vuelo, puedo sentir el aire chocando con mi cara, haciendo que mi cabello se desordene, me siento libre, sin nada que me sujete al suelo, estoy en el aire.....—¡Emily!¡Despertate!
Pierdo el equilibrio, desorientándome, cayéndome. ¿Que está ocurriendo, veo todo negro, cierro aún más los ojos, esperando que llegue el golpe...pero nunca llega.
—¡EMILY!
Me despierto alterada, con mi corazón latiendo fuertemente contra mi pecho— ¡Mamá!¿Que pasa? ¿Por qué gritas?
Casi me muero de un infarto.
Me froto los ojos; y veo el reloj de mi mesita de luz.
Uy ya es tarde.
—Levantate ya, vas a llegar tarde el primer día de universidad.
No me gusta mucho estudiar, pero si tengo que hacerlo lo hago. Mentira ¿Que les puedo decir? Lo odio con mi alma.
—Ya mamá, ya bajo—le contesto con voz soñolienta.
—Dale, ya está el desayuno listo, a este ritmo te irás sin desayunar, y el desayuno es la comida más importante .....—escucho sus pasos alejándose... bla bla bla, ya me da toda la información de que el desayuno es el más importante del día, ya me sé de memoria el discurso. Si fuera por mí no desayunaría, pero ella me hace desayunar, así que le hago caso porque no quiero que se enoje.
Me levanto, voy al baño; hago mi ritual matutino, me cambio, me pongo unos jeans y una remera manga corta lisa de color celeste.
—¡¡Emily vamos!!— mamá gritando desde abajo.
—¡Ya voy mamá!— agarro mi celular y lo prendo; bajo las escaleras con mi mochila.
Entro al living y me encuentro a mis hermanos más pequeños, Amy y Luke, que ya están listos, seguro papá ya se fue más temprano al trabajo. Últimamente está trabajando demasiado.
—Ven, toma tu desayuno, come en el viaje, sino van a llegar tarde, pero no te olvides.— me tiende el desayuno con una sonrisa.
—Gracias ma— le doy un beso en la mejilla y camino detrás de los chicos hacia la puerta de salida.
Desde que tengo licencia llevo a los chicos al colegio, porque papá se va más temprano al trabajo y mamá también. No me mal entiendan, no tengo problema de llevarlos porque yo entro a las 8 a la universidad. Pero a veces me piden que los lleve a cualquier lado.
—¡Chau chicos, Suerte!— quince minutos más tarde, saludo a Amy y a Luke.
Amy está en el último año de secundaria y Luke empezó primer año, así que los dos empiezan un año bueno.
En realidad nose, para mí fueron los mejores, creo...
El primer año de secundaria es empezar otro mundo, salir de ser chiquitos a ser adolescentes, a independizarse, conocer chicos, hacer travesuras y saltearse clases por ir de shopping con tu amigas y millones de cosas más. Nunca lo hice...a veces me arrepiento de eso, pero cuando yo tenía doce años era demasiado tímida, tenia a Dari, mi mejor amiga desde pequeñas. Siempre estaba con ella.
El último año empezás a ser adulto, a ser realmente consciente que después de ahí, tenés que tomar tus propias decisiones. Pensar que querés estudiar, que querés trabajar, como te ves en diez años más. Equivocarse y hacerse cargo de las consecuencias. Ya no están nuestros padres para limpiar nuestros problemas. No digo que no lo hagan más, si obviamente, son nuestros padres y a veces necesitamos de ellos para aprender, pero queda en nosotros tomar su consejo o no, como todo en la vida. Nosotros tomamos nuestras propias decisiones.
Hay una frase que me gusta mucho que dice "Nuestras decisiones determinan nuestro destino".
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Mi Cielo
Teen FictionEmily Brewer "Mily", es una chica universitaria que hace todo a su tiempo; es indecisa e insegura al tomar decisiones, pero siempre está dispuesta a ayudar a toda persona que la necesite. Es una persona amorosa y se hace querer por su personalidad. ...