CAPITULO 3

95 9 17
                                    

Ya habrán pasado como unas dos horas desde que llegaron los jugadores. Estoy bailando con D y J y un par de chicos más. No soy de tomar mucho alcohol por lo que estoy sobria, pero aún asi bailo, muevo mi cabeza, mis caderas y canto con D todas las canciones que nos sabemos.

Nose cuanto estamos bailando pero ya no siento mis pies, así que les digo a los chicos que voy a tomar aire afuera.

Me dirijo hacia el patio trasero, chocando con muchas personas hasta que sin darme cuenta ya estoy afuera. Siento el viento frío provocando que mi cuerpo reaccione al cambio de temperatura estremeciendolo completamente; aunque haga calor, algunas noches baja un poco la temperatura.

Llego a un banco, me siento y me saco los zapatos. -Ay qué bien que se siente esto- Los dejo a un costado y me quedo mirando el cielo negro, las estrellas y la luz de la luna haciendo contraste con este.

Nose cuanto tiempo pasa, pero ya me agarró frío y no volví a ver a mis amigos. Así que entro y los busco. Ya no hay tanta gente, pero todavía me cuesta pasar entre las personas.

No los encuentro por ninguna parte.
-Ay, ¿Donde se metieron?- Bufo, ¡que buenos amigos eh! Espero que D no me haya dejado plantada acá.

Esto es como buscar a Wally.

Después de buscar un rato más entre la gente sigo sin encontrarlos.

Me dirijo hacia la puerta principal, mandándole un mensaje a D que ya me vuelvo para casa y que me tomo un taxi. Paso la puerta principal, enviando el mensaje y me choco con un cuerpo definido, que me hace retroceder tres pasos y que se me caiga el celular.

—Ey, ¿estás bien?—me pregunta con un tono de procuración. En ese momento subo la cabeza para encontrarme con esos ojos marrones claros, que todas las chicas de la universidad babean. Me le quedo mirando, nose porque pero mi voz no sale, trago grueso y trato de decir algo.

—Yo...eh...lo-lo siento.

¿Acabo de tartamudear?

Si, acabas de tartamudear

¡¡Que vergüenza!!

Me agacho para agarrar el celular y me levanto lo más rápido que mi cuerpo me permite.

Lo miro de nuevo y me está mirando con esos ojos marrones claros con las cejas fruncidas, sin entender que fue eso. Creo que estoy sonrojandome, que vergüenza. Agacho la cabeza así mi pelo suelto tapa mi cara..

¡Salí de ahí, ya mismo!

Paso por su lado con la cabeza baja, sigo sintiendo su mirada en mi espalda un rato más, hasta que creo que alguien lo llama por las bebidas que tenía en las manos.

En ese momento siento que respiro nuevamente, sin darme cuenta que había aguantado la respiración todo ese rato.

Logan

Hoy es sábado y tengo partido, es el primero de la temporada, aunque es un amistoso, me exigen ganar, como soy el capitán tengo que llevar adelante a todo el equipo.

Me gusta este deporte, y me gusta ganar, eso me hace ser muy competitivo en cada juego. Y aveces es lo que necesitan algunos..

Ya estamos preparados en el vestuario, les digo unas palabras para alentarlos y nos preparamos para salir a la cancha.

Yo soy el último en salir y cuando la gente me ve escucho que gritan aún más, diciendo mi nombre.

Al instante que salgo a la cancha miro como en cada partido hacia mi derecha para que mí mirada se encuentre con la persona de mis pensamientos de cada noche.

Mi CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora