Después de casi dos semanas sin hablar del tema, solucioné que debía hacer algo. Theo utilizó el pretexto de la universidad para evitarme, y había agotado la credibilidad de dicha excusa.
Incluso si terminaba conmigo, lo superaría. El problema es que no nos habíamos dicho nada a la cara.
Al final, tuve que recurrir a Pascual, su mejor amigo.
—Creo que va a dejarme.
—Qué raro, porque no me ha dicho nada. Aunque literal, no me ha dicho nada de nada —Su voz se cargó de un rencor apenas descubierto—. Ya va, Theo ha pasado de mí últimamente.
Me obligué a sonreír. Mi intento por recuperar la confianza de Theo había provocado que Pascual cuestionase su amistad con él. Y es que vamos a ver, no hice ni dije nada, pero tendría que asumir la responsabilidad si es que esos dos peleaban.
—Estaría ocupado.
De repente, la situación se invirtió, ya no era yo quien pedía consejos sino quien los daba.
—Sí, claro —farfulló molesto—. Ahora es demasiado guay para decirme nada. Y yo ayudándole...
Pascual me habló de una convención a la que asistiría la facultad de Theo. Era una feria abierta, así que no tendría problemas para entrar.
Al instante, sacó su móvil con la intención de avisarle al chico.
—¿Y?
—Ehm...
—¿No quiere que vaya? —murmuré decepcionada.
Me había saltado mis clases e iba a pasar de mi trabajo. Olivia no me lo perdonaría nunca. Y al parecer, Theo tampoco.
—Hostia no. Ha sido error mío —se disculpó para luego aclarar: —Olvidé que su ex también va a estar.
—No pasa nada, ya he conocido a Anabel.
—¡Ana no es su ex! —exclamó, primero asombrado, y luego divertido por mi suposición—. Diría que tiene una personalidad demasiado agresiva, pero eres igual. Igual y sí que deberías cuidarte de ella.
¿¡Tan popular es Theo!? —pensé sorprendida.
—Anabel es la hermana menor de Micaela. Su ex —procedió a explicarse—. De Mica no tengo idea, pero sé que Ana quiere que ellos vuelvan.
Pascual se enrolló otra media hora hablando de su amistad con Anabel. De lo concienzuda que era, de lo buena hermana que era, de lo buena amiga que era, de lo genial que era. Y otra cosa no sé, pero la chica seguía sin agradarme.
Respecto a Micaela, se limitó a decir que era maja.
—Vale Pascu, —lo detuve— tengo que irme.
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Tres es la medida
Teen Fiction¿¡Ella sale con dos chicos a la vez!? Puede que sí, pero su historia no va de infidelidades sino de descubrimiento. De experimentar con el corazón, y de ir más allá de las relaciones normativas. Lula ha terminado con su novio de toda la vida, el pr...