𝐕𝐀𝐒 𝐀 𝐐𝐔𝐄𝐃𝐀𝐑𝐓𝐄 || SERGIO REGUILÓN ||

✿ | • cuatro • | ✿

Semanas después:

- Y esta es la última caja - Dije mirando a Fede entrando a mi nuevo departamento -

- ¿Sabes que podrías quedarte en mi casa? No era necesario que te mudaras a otro departamento - Negué -

- Fede apreció muchísimo el cariño que me tienen y que siempre quieran ayudarme, pero esto era y es necesario, necesitaba independizarme, valerme por mi misma -

- Bueno, respetaré tu decisión amiga- Asentí sonriendo - ¿Y ya te sientes un poco mejor? Han pasado semanas desde aquel encuentro con Carvajal... -

- Estoy bien Fede - Sonreí - No tienen por qué preocuparse, Dani Carvajal es pasado en mi vida -

- Me alegra escuchar eso, y espero que la charla que tuve con él hace unos días le sirva para que se aleje de ti -

- ¿Tú hablaste con él? - Mire a Fede sorprendida -

- Si - Responde - Y no fui el único, Saúl, Yannick y Koke también lo hicieron. Cuando se enteraron de que estuvo en tu fiesta de cumpleaños, los tres fueron a su casa -

- Fede les dije que no intervinieran en esto, menos por los chismes que luego la prensa inventa -

- Era necesario hacerlo, no queremos verte sufrir Liz, no lo mereces. Por eso me tomé la molestia de... -

El timbre de mi departamento se escuchó, mire a Fede confundida, pues no esperaba a nadie y menos a mis amigas, ellas ahora están en sus trabajos.

Camino hasta la puerta principal, abro la puerta y me encuentro a Sergio con un pequeño pastel en la mano.

- Hola - Sonríe y correspondo a ese gesto de la misma forma -

- Hola -Respondo - ¿Qué haces aquí? - Pregunte -

- ¡Sergio amigo! Qué bueno que estás aquí - Fede saluda a Sergio - Bueno, yo me tengo que ir, Danny llamo y quiere que vaya a recogerla a su trabajo -

- Pero Danny... - No terminé de hablar porque Fede beso mi mejilla y salió de mi departamento, dejándome a solas con Reguilón -

- Puedo pasar - Mire a Sergio y asentí -

Me hice a un lado para que Sergio entrada a mi departamento, cerré la puerta y me acerque a él.

- Te traje este pequeño detalle, no sabía que traerte y esto fue lo único que se me ocurrió - Sonreí y tomé el pastel, fui a la cocina y lo deje en la barra -

-Te ofrecería algo de beber, pero como ves recién me mudo y no he hecho las compras - Dije volviendo a donde está - Fede te dijo que vivía aquí, ¿no es así? -

-Si - Río - Yo le pedí que me lo dijera -

- ¿Por qué? - Le pregunté -

- Porque... Porque esa noche en la fiesta de tu cumpleaños aceptaste tener una cita conmigo y como no te pedí tu número - Reí y mire al suelo, ¿nerviosa? - Y dime, ¿aceptaras ser mi cita hoy? -

- Si - Dije y una sonrisa se formó en el rostro de Sergio - Pero tengo que desempacar mis cosas, mañana vuelvo al trabajo y... -

- Que nuestra primera cita sea ayudándote a desempacar tus cosas - Reí divertida - Tengo el resto de la tarde libre -

- Está bien, que nuestra primera cita sea desempacando mis cosas - Asentí - Pero después me acompañas hacer la compra y si no tienes problema te invito a cenar esta noche, ¿aceptas? -

- Por mí estaría todo un día a tu lado - Me sonrojo por eso y Sergio parece notarlo - ¿empezamos? -

- Si - Respondo -

El resto de la tarde junto a Sergio acomodo cada una de las cosas, ya sea en la sala o en mi habitación, mientras eso sucede las risas son el principal protagonista sin contar las miradas en las que coincidimos.

Al terminar de acomodar todo, Sergio se ofrece a llevarme al supermercado y comprar lo necesario para la cena. Volviendo a mi departamento, entre los dos cocinamos, y terminamos cenando entre risas y anécdotas tanto mío como las de él.

- Gracias por este día Sergio, jamás me había reído tanto -

- Cuando quieras podemos repetirlo - Asentí sonriendo - Mañana paso por ti a tu trabajo, solo mándame tu dirección -

- Tienes ya mi número, mándame mensaje por la tarde y te la paso - Me acerque a él y deposite un beso en su mejilla - Te veo mañana -

- Hasta mañana Liz - Los dos sonreímos y ese es el último gesto que nos dedicamos -

Sergio se aleja hasta el elevador donde una vez que entra cierro la puerta de mi departamento.