Antiguo Amor

Recuperando el tiempo

Narra Nick:

Cuando llegamos a casa de Damon, corrí hasta la habitación donde estaba Genevieve, una agotada Sophie la acompañaba y creo que no era la única en ese estado, había sido un día complicado, y eso que apenas comenzaba la semana.

Mire el delicado cuerpo de Evie, aún seguía con la piel gris, como si de un cadáver se tratara.

De camino aquí, mi hermano me contó que el vampiro que me secuestro, Darius, les dijo que mi sangre le ayudaría a salir de esa muerte fingida. Lo que me puso a pensar en cómo Darius apareció en el momento preciso para raptarme, como si supiera lo que iba a pasar y que solo mi sangre la ayudaría.

Como si hubiera planeado cada movimiento, todo por conseguir ese collar.

Pero ya tendría tiempo para pensar en eso, ahora había algo más importante que hacer.

― ¿Qué tengo que hacer? ―me acerque y tome la mano sin vida de mi chica.

―Damon, ¿puedes encargarte? ―Sophie lucia realmente cansada.

―Hey, ven... ―Joe se acercó a ella y le ofreció su mano. ―Te llevare a que comas algo. ―la rubia acepto su mano y salió de la habitación con mi hermano.

―Dame la mano. ―hice lo que el vampiro dijo y con un cuchillo hizo un corte en mi muñeca para luego colocarla sobre la boca seca de Genevieve. ―Espero que esto funcione.

Miraba todo sin decir una sola palabra, luego sentí una ligera succión en mi piel. Estaba funcionando. Con mi mano libre acaricie el cabello de Genevieve y note como lentamente su piel recuperaba color.

―Lamento no haber evitado tu secuestro. ―la voz de Damon era casi un susurro. ―Mi deber es protegerte, pero solo pensé en ella. ―

―Yo hubiera hecho lo mismo. ―lo mire. ―No te preocupes. ―

―No lo entiendes, Nick, solo pude pensar en ella. ―enfatizó las últimas palabras.

―Ah... ―asentí en señal de entendimiento. ―Si ella no se hubiera controlado aquel día, o cualquier otro, y me hubiera atacado... ―

―Es mi mejor amiga. ―dijo interrumpiendo. ―Y tu...―

―Soy un simple humano. ―

―Eres el humano que ella ama y haría todo lo necesario para verla feliz, pero si tengo que elegir entre tu vida y la de ella, Genevieve saldría ganando. ―alejo mi muñeca con cuidado y me ofreció un pañuelo para contener la sangre.

―En eso pensamos igual. ―mire el rostro de la mujer de la que hablábamos, había recuperado por completo su color y solo aparentaba dormir. ― ¿Damon? ―lo mire y el levanto sus azules ojos del rostro de Genevieve para encontrarse con el mío. ― ¿Tu sientes algo por ella? ―

―Por supuesto. ―dijo sin titubear. ―Esta mujer es mayor que yo por 155 años, me enseñó a vivir como vampiro y sé que no necesita de nadie para que la cuiden, pero aun así la amo como si fuera mi hermana menor. ―sonrió de costado. ―Es mi familia―

Suspire, más que nada por alivio al escuchar sus sentimientos.

―Trata de cumplir la promesa que le hiciste, Damon, pero si tienes que elegir entre ella o yo, elige siempre a Evie, porque pase lo que pase, yo siempre la voy a elegir. ―devolví la mirada al rostro mi chica con un extraño sentimiento de deja vú.

―No cabe la menor duda... ―dijo él de repente. ―Aunque los siglos pasaran y las circunstancias los trataran de separar, su amor si es real. ―

¿Qué? Lo mire en busca de una explicación por su comentario, pero un suave quejido me hizo olvidar el tema, mire como Genevieve abría sus ojos despacio.