¿Quién es esa chica?

849 93 131
                                    

Al entrar al aula de clases, se movía tan delicadamente que parecía una experta en ballet, pero su mirada era la de un felino en busca de su presa. Nada en ella era de este mundo y pronto averiguaría que no estaba tan equivocado.

Nicholas miró a la nueva chica con atención, ya había pasado mucho tiempo desde que el último de sus compañeros se había integrado a su clase, y a esta altura le extrañaba un poco que llegara alguien nuevo.


Narra Nick:

Ella era como cualquier otra de las chicas con las que había salido, era guapa, con un cuerpo de infarto, cabello largo y oscuro que contrastaba con su brillante piel de porcelana, sin embargo, fue en sus ojos en los que note diferencias, esos ojos dorados que miraban a su alrededor con seguridad.

―Denle la bienvenida a su compañera― El profesor Phineas interrumpió mis pensamientos, pero no me hizo quitar mis ojos de encima de ella. ―¿Podría presentarse señorita? Así la conocemos un poco. ―

La chica posos sus hermosos ojos en el profesor y después volvió a mirar a los compañeros.

―Hola, soy Genevieve Von Kleist ―Su voz fue como un soplo al alma, era suave, con un tono de seducción.

―Por tu apellido y el ligero acento puedo pensar que eres extranjera, ¿me equivoco? ―

―Soy de Rumanía―

― ¿Eres pariente del conde Drácula? ―Las risas del fondo no se hicieron esperar, la mayoría de los chicos del salón eran algo tontos y creían que cualquier cosa era graciosa.

―Deja los chistes, Bradley― Phineas miro a Genevieve de nuevo, era notable el interés que sintió por las raíces culturales de la nueva chica. ― ¿Por qué decidiste venir a Nueva York? ―

―Negocios, de mis padres... viajamos mucho―

―Bueno, espero que puedas integrarte rápido a la institución. ― Al parecer la seriedad de la joven desanimo al profesor. ―Busca un asiento y únete a alguno de tus compañeros para que puedas tener la lectura, hoy hablaremos de literatura del viejo continente. ―

Sentí un temblor en las puntas de mis dedos, cuando la belleza europea se dirigió al asiento que se encontraba a mi lado y básicamente olvide como se hablaba cuando me pregunto si podía sentarse ya que solo asentí rápidamente y abrí mi libro de literatura.

― ¿Puedo unirme a ti? ― Esa voz me provoco escalofríos, pero fue su sonrisa la que movió mi mundo por completo.

―Sí, adelante― como deseo haber sonado un poco más confiado de lo que me escuche. Siempre suelo ser yo quien pone nerviosas a las chicas que conozco, sin embargo, era ella la que provoco electricidad por todo mi SNC. Ella acerco su asiento al mío y su proximidad me inundo.

―Soy Evie― se presentó conmigo de nuevo y volvió a dedicarme una blanca sonrisa.

―Lo sé, lo escuche... quiero decir... lo siento...― ¿POR QUÉ ESTOY BALBUCEANDO? ― Me llamo Nicholas, Nicholas Loughty...


Narra Evie:

Entre más lo veía, más me gustaba, Nicholas Loughty es atractivo y aunque parece algo torpe, tengo la certeza de que solo es porque lo pongo nervioso, pero yo me voy a encargar de que entre en confianza y sea íntimo conmigo.

Al frente del aula, el profesor explicaba algo sobre la literatura isabelina, tema que sería interesante si no hubiese vivido sumergida entre las obras de los Thomas y visto al mismísimo Shakespeare interpretar uno de sus propios dramas...

―Juro que si menciona Romeo y Julieta voy a golpearme contra la pared― Le susurre a mi sexy compañero.

― ¿No disfrutas de la típica tragedia romántica? ― susurro él en respuesta dedicándome una sonrisa de lado.

―No cuando se ha vuelto un cliché, este siglo ha viralizado la historia como si hubiese sido la mejor de William―

―Entiendo que sea nueva en el grupo, señorita Von Kleist, pero eso no le da ningún privilegio para ignorar mi clase― El calvo profesor interrumpió su propio discurso y me hizo un llamado de atención. ― Y usted, señor Loughty, si pretende conocer más a su compañera le recomiendo que use la hora de la comida o lo haga después de clases, ¿entendido? ―

―Sí señor ― Nick me miro disculpándose como si él hubiese sido el culpable del regaño, y posterior a eso tomo el libro y lo abrió hacia mí, pretendiendo que ponga atención.

Sin decir una sola palabra, tome de mi bolso un cuaderno y un bolígrafo, escribí algo y se lo pase disimuladamente a mi compañero.


Narra Nick:

Al principio no entendí muy bien porque Genevieve coloco su cuaderno en mis piernas, pero después vi que en el blanco papel destacaba una pequeña nota.

"El hombre dio una buena idea, ¿Por qué no salimos después de clases? Podemos conocernos y quizás puedes mostrarme algo de tu ciudad"

Genevieve me estaba invitando a salir, yo era quien invitaba a las chicas, parece que me estoy enfrentando a un tipo femenino fascinante. Tomé el bolígrafo de sus delicados dedos y escribí un "de acuerdo" justo debajo de su caligrafía. Ella sonrío... ¡demonios! ¿Qué tiene esta chica que puede provocarme un torbellino de emociones con solo una sonrisa? Definitivamente salir con ella sería una experiencia nueva para mí, lo repito, algo fascinante.

Pero, ¿Qué estoy diciendo? Oh vamos Nicholas, solo es una chica nueva, si, si... una preciosa y condenadamente sensual chica nueva, pero no es nada del otro mundo. No puedo comenzar a creer en ese asunto del amor a primera vista, aunque por alguna razón no me molestaría en lo más mínimo comenzar a creer y hacer cosas nuevas con esta mujer... como, por ejemplo, el sacarla del salón, llevarla al fondo de la biblioteca y mostrarle algo más que la ciudad.

Tomar a Genevieve por la cintura, besarla por el cuello y darle pequeñas mordidas, dejando ligeras marcas por su suave piel blanca. Pasar mis manos por su cuerpo y escucharla gemir en mi oído, escucharla decir mi nombre mientras acaricio sus pechos, deslizar su ropa hacia el suelo mientras con mis labios reemplazo el lugar de mis manos y beso con cuidado sus pezones...

Un estruendoso ruido me saco de mis pensamientos, la campana anunciaba el final de clase... ¿Cómo es posible? ¿Cuánto tiempo estuve fantaseando? ¿Se habrá dado cuenta?

―Según mi horario, tengo clase de trigonometría― La mire, estaba hablándome, ¡reacciona Loughty!

―Oh si... mmm yo tengo 2 horas de laboratorio―

―Entonces supongo que nos veremos al terminar las clases... te esperare afuera―

―Bien, ahí te veré entonces, Evie―

―Nos veremos Nicholas― me guiño un ojo, tomo sus cosas y salió del aula moviendo las caderas, ¿Acaso intentaba seducirme? Porque vaya que lo está logrando.

―Nos veremos Nicholas― me guiño un ojo, tomo sus cosas y salió del aula moviendo las caderas, ¿Acaso intentaba seducirme? Porque vaya que lo está logrando

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Antiguo AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora