Tony miró a su amigo sin comprenderlo aún, intentó no hacer una mueca cuando vio a Steve doblar la sexta o séptima tarjetita de la tarde. Estaban en el living de la torre de lo Vengadores, cortando corazones, y escribiendo en diferentes colores de cartulinas prendas ~que a opinión de Tony~ eran demasiado tontas y predecibles.
" ¿Si sabes que esto es una estupidez, no? " murmuró de nuevo, el corazón de papel que tenía en la mano le había salido chueco, y le dolían los dedos de tanto usar las tijeras.
- "Eres un amargado, Anthony ." Steve lo fulminó con la mirada, tenía una mejilla llena de glitter rosa, y las manos manchadas con tinta de lapicera. " Ya te dije que tu no tienes que jugar, solo ayúdame ahora y no te molesto más " le pidió por décima vez en el día, y optando esta vez, por un puchero y los ojos de perrito, que a juego con el glitter rosa y sus ojos oceánicos, daban una vista a la que nadie podría decir que no, nadie menos Anthony.
"El 14 de febrero es lo más comercial que existe. " fue lo último que dijo. Steve ni siquiera le respondió, y tony solo pudo poner los ojos en blanco antes de continuar con la tarea de cortar corazones.
No le gustaban ese tipo de fechas, la gente se dividía en diferentes grupos, los solteros compartían frases en sus redes sociales, sintiéndose superados e intentando ocultar que en realidad les molestaba no tener pareja (quizás no todos, pero Tony podía creer que si a la mayoría) nadie pública y grita con tanto fervor su situación sentimental, y eso lo llevaba al otro grupo, el de los enamorados, solo parecían acordarse de sus parejas ese día, subiendo cuanta frase y foto encontraban, luciendo algo que estaba lejos de la realidad.
Claro que no era porque la persona que lo tuviera delirando, ni siquiera lo notara, nada que ver.
"Tus caricias han dañado mi mente,
Solo para mí hoy quiero tenerte
Contigo he tenido suerte"Suspiró pesadamente, él no era así, alguien odioso y amargado, solo que últimamente todos a su alrededor parecían encontrar lo que querían -mejor dicho a quien querían- menos Tony, y su frustración no hacía más que aumentar según pasaban los días. Justo en esos momentos estaba al borde. Entonces Peter bajó por las escaleras, representando en carne y hueso todo lo que Tony quería, y no podía tener.
"No puedo evitarlo
Me muero con solo imaginarlo"Se concentró aún más en los colores de cartulinas, deseando que Peter los ignorara y se fuera a molestar a Wanda en la cocina, o a Thor en el gimnasio. Pero eso no sucedió, el menor se acercó a ellos riéndose. Obviamente iba a hacerlo, Tony también sabía que él y Steve haciendo cosas como esas no era una imagen muy natural o frecuente, también se reiría si no supiera que su amigo iba a terminar de enojarse con él.
"¿Y esto?"agarró uno de los corazones. Tony se avergonzó al notar que era el que había cortado chueco, o bueno, uno de todos los que el había cortado chueco."¿Ahora se dedican a hacer manualidades? "se río divertido.
Tony intentó no sonrojarse. Desde que Peter estaba más grande, su carácter tímido había dado paso a esa versión diferente, una en la que el chico decía todo lo que se le pasaba por la cabeza. El mayor no iba a admitirlo pero eso le gustaba, peter ahora era mas suelto con él, y ya no salía corriendo sonrojado cuando le preguntaba o decía algo.
"Tu cuerpo me tiene delirando
De repente te estoy extrañando"Sin embargo, ahora el que se ponía nervioso era Tony, lidiar con un chico como Peter no fue tan fácil como creía.
"No molestes Queens" gruñó Steve, al mismo tiempo que pegaba con demasiado fuerza un corazón al costado de una carta color roja. "Ya bastante tengo con el humor de Anthony."los ojos de Peter se posaron en él, y solo sintió ganas de correr.