HUG ME.

SECUELA

Luego de darle muchas vueltas y armar más o menos una historia, tomé la decisión de hacer una secuela, como el inicio de una nueva generación de "Martínez Lee" con muchas más estupideces. Espero que la disfruten, porque yo aún no estoy lista para soltar a esta familia:(

Pd. El prefacio ya está publicado.

~Estrella.

Siempre he pensado que cada persona tiene un color, uno que lo identifica y lo hace especial.

Para la sorpresa de algunos, hay muchos más colores de los que pueden imaginar... Yo veo toda una infinidad. Para mi no existen blancos, negros, asiáticos, gays, gordos... Solo colores, unos más hermosos que otros pero, colores al fin y al cabo.

Lo gracioso es que muchos disfrutan congrasiarse del que recibo físicamente... Aunque yo no veo en mí ningún color en específico o que resulte especial. Soy como una hoja en blanco esperando a rellenarse.

Papá dice que la gente estúpida es color mierda, y aunque mamá no me permite utilizar las palabras de papá, yo le doy la razón.

Incluso me llena de rencor hacia mí misma el poder ver el color de la gente desagradable y desconocer el mío... Es frustrante sentir que también en eso soy tan distinta.

Pero... eso cambió cuando llegó a mi vida, ese alguien, que con tantos colores en él e irradiando en toda su intensidad me cautivó; dominó mis pensamientos y sentimientos con solo tocarme con aquel azul cielo que desprendía de sus manos y posar esa mirada color púrpura en mis insípidos ojos... Sus abrazos se sentían como color esmeralda y era un hecho que su sonrisa era de un rosa pastel que te calaba en los huesos. Incluso no podía evitar pensar que era un egoísta empedernido acaparando tantos colores para si mismo habiendo personas que están tan faltos de uno, como yo.

Dicen que cuando una persona llega a tu vida te roba un pedazo de ti... Pero, sorprendentemente, él me otorgó un color, uno desconocido y que sólo nosotros conocíamos... Era nuestro color especial, uno que puede sentirse.

"Puedo sentir el color de tus besos..."