HUG ME.

Epílogo.

Narra Sara-Lee.

Me miraba al espejo con el hermoso vestido color rosa pastel que eligió Hong para mí (les pido amablemente que noten el sarcasmo). Parecía un estúpido cupcake insípido con este trapo y si Hong no fuera mi prima, ya estaría fuera de esta cosa.

Es la boda de Hong y Josh luego de 9 tortuosos meses de preparación.

Aunque la propuesta de Josh fue, digamos... Peculiar, mi prima aceptó con gusto, gracias al cielo. ¿Quién pide matrimonio con un tampón? Dios, creo que te olvidaste de uno de tus hijos por aquí.

Sonreí al darme cuenta de lo que era mi vida a los 24 años. Directora y productora reconocida de Netflix, con una familia que me ama, amigos que no me abandonan, y un torpe pero increíble novio boxeador que tiene el cerebro en los puños.

Así es, Caleb "El espectro" Martínez y yo estamos de vuelta.

Se mudó a NY dos meses después de nuestro "reencuentro", vivimos juntos y estamos siendo lo mejor el uno para el otro cada día. Sé que tuvimos un pasado extraño y difícil, que probablemente éramos muy incompatibles, pero realmente no estoy mejor con nadie más.

Al ser la única dama de honor de mi prima, y él ser el padrino, estamos en habitaciones separadas, pero quisiera que estuviera aquí porque Hong me está enloqueciendo.

Tomé la copa de Champagne y cuando estuve a punto de acercarla a mi boca, una novia loca me la arrancó de las manos con una mirada de advertencia.

- No puedes tomar.- Me regañó apuntándome para luego beber el contenido de un trago.

- No pasa nada en el primer trimestre.- Me quejé como niña pequeña.

- Cállate, beberé por las dos.- Dijo y sirvió otra copa.

- Hong, no puedes subir ebria al altar, deja eso.- Alejé la copa y la botella de ella y suspiró mirándome a los ojos.

- Estoy muy nerviosa, Leonsito.- Sonreí y la abracé con fuerza, siendo correspondida de igual manera.- Josh se bañó dos veces por mí ¿Entiendes? Esto va en serio.- Reí ante eso mientras se alejaba para colocarse el vestido con cuidado de no dañar el maquillaje ni el peinado.

La ceremonia estaba por comenzar.

El matrimonio se haría en la terraza de un lujoso hotel aquí en NY, tal como pidió la novia, y la recepción sería en el salón de fiestas del mismo.

- Hong, él te ama ¿De acuerdo? Puede ser muy tonto y algo despistado, pero ese mono oloroso está loco por ti.- Dije con una sonrisa.

- Solo espero que siga siendo así, porque estoy por cumplir 27 años, Sara-Lee, no puedo volver al ciclo de citas otra vez, encontrar buenos hombres es más díficil si tú vagina ya no se humedece como antes.- Reí a carcajadas ante las palabras de mi prima.

Siempre ha sido tan ocurrente, directa y muy transparente, es por eso que es una excelente abogada.

Unos toques a la puerta de la habitación de hotel nos indicaron que ya era hora así que salí del cuarto tras darle un abrazo y me dirigí a mi lugar junto al altar.

Josh estaba justo ahí, esperando inquieto por su novia, en medio de ese altar de flores de jazmín que Hong mandó a hacer, mi novio estaba junto a él y apenas me vio me lanzó una sonrisa que ahondó en lo más profundo de mí. Me posicioné en mi lugar y todo se quedó en silencio.

Hong no quería que entrara tras ella porque dice que al ser más alta la opacaría, lo cual es una tontería pero bueno, a la novia lo que pida.

La música típica de boda comenzó a sonar, indicando que la novia estaba haciendo su entrada triunfal junto a se padre, el tío Liu.