HUG ME.

Capítulo 27.

-No puede ser que se haya tomado todo el puto alcohol de su padre.- Habló Chris como si yo no estuviera presente, revisando el refrigerador con enésima vez.

-Lleva días bebiendo como cosaco y trayendo putas a la casa.- Se quejó mi hermana sirviéndose café.

Miré a mis amigos que estaban todos sentados alrededor de la mesa menos Chris.

-¿Qué dice Chinita al respecto?- Preguntó Alex ganándose una mirada de mi parte.

-¿Quién sabe? Desde el día de la pelea solo dejó comida hecha y se fue.- Alanna subió los hombros como restándole importancia.

Chris se acercó y la abrazó por las espaldas.

-Espectro ¿Estás consciente de que cuando tu padre llegue a casa y vea que te acabaste todo su alcohol te matará?- Habló Robbie en señal de burla.

Solo alcé los hombros.

-Su padre trae licor todos los días, no creo que le haga problema.- Respondió Josh por mi.

-Chicos, tengo hambre.- Se quejó mi hermana con voz chillona.

Estos días han sido monótonos. No he querido hablar mucho y Alanna no hace más que comer todo el día. 

Sara-Lee no ha vuelto más a la casa y eso, aunque no quiera admitirlo, me está matando.

El celular de Josh comenzó a sonar mientras que Alex iba a comprar una pizza con Robbie y Chris.

-¿Bueno?- Hizo una pausa.- No lo sé Chinita ¿Fiesta tú?- Mi sentidos se pusieron alertas y le lancé una mirada a Josh. Su respuesta fue poner rápidamente el altavoz.

-Mi prima Hong regresó a la ciudad y quiere que te invite como algo así de que no sabes nada que vino y eso.- Hizo un silencio.- Oups... Eso no debía decirlo.- Alanna soltó una risita al escuchar la imprudencia tan tierna de Sara-Lee.

Esbocé una pequeña sonrisa.

-¿La de la otra vez?- Es que Josh no es más tonto porque no está más grande.

Giré los ojos.

-La única prima mía que conoces y que se llama Hong, Josh.- Sara-Lee soltó una pequeña risa.- En fin, ella quiere que se vean allá y pues... yo quería saber si...- Hizo una pausa como sopesándolo.- Si Alanna y Caleb querían asistir.

Hice una pequeña mueca.

-Les preguntaré y te avisaré, te llamo al rato.- Y colgó.

-¿Irás?- Me preguntó Josh sentándose a mi lado.

Negué con la cabeza.

-Yo sí quiero ir.- Se unió Alanna.- Pero no quiero dejar a mi hermano solo.

-Eso lo puedo solucionar yo.- Josh se levantó y corrió al pequeño jardín delantero.

Luego de unos minutos en los que todo fue silencio sepulcral entre mi hermana y yo, Josh apareció con una sonrisa triunfal.

-Ya lo tengo todo solucionado, Alanna ve a prepararte nos vamos de fiesta con la prima de Sara-Lee.

-¿Y mi hermano?- Replicó Alanna.- No lo dejaré solo.

Josh se sentó junto a mi de nuevo.

-Lo sé, y por eso llamé a Sara-Lee y le dije que le pagaría 20$ por cuidar de él mientras los grandes nos vamos de fiesta.-¿Que hizo qué?

-¿Me contrataste una niñera?- Mi voz salió ronca, llevaba ya bastante tiempo sin hablar.

-Algo así.- Sonrió Josh.