Azul como el cielo. [ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ] •OMEGAVERSE•

⚘ Veintidós. ⚘

El día en el refugio era cálido; una muy agradable mañana del mes de mayo. El cielo despejado sobre los hombres y mujeres del lugar estaba acompañado de la radiante luz del sol. Kim TaeHyung miraba en silencio el entrenamiento.

Un mes había pasado desde el ataque a Jeon JungKook.

—¡Deben ser más fuertes! —grita SeoJun a la distancia—. ¡Si los vencen aquí, los vencerán allá fuera!

El alfa rubio se acerca hasta donde se encuentra Kim TaeHyung cuando nota su presencia silenciosa. Mira un poco su aspecto lúgubre junto a su tono de castaño oscuro natural sobre su cabeza.

—¿Hay noticias de Hyeri?

SeoJun niega y limpia el sudor de su frente con fuerza.

—Dijo estar muy ocupada sobre un asunto de vida o muerte junto a Jung Hoseok

—¿Él sabe lo sucedido con Park Jimin?

—Supongo... —suelta el rubio, mirando a TaeHyung—. Han pasado unas cuantas semanas, aún no sabemos nada sobre el grupo Sangre Pura

—No es tan raro que no haya víctimas de sangre beta, lo que es preocupante, es la inesperada desaparición de Jimin, YoonGi y los otros cuatro alfas

—Antes de perder comunicación con mi hermana, dijo que Kim NamJoon no había mandado por su propia voluntad a Min YoonGi; el alfa fue quien solicitó ser asignado a esa misión, y NamJoon aceptó por el lazo familiar

—Es claro que tenía intenciones de formar un ejército pese a las palabras de su Gobernador, pero... —TaeHyung se interrumpe mientras comienza a tener una sensación extraña—. Era... su objetivo

—¿Sucede algo? —cuestiona SeoJun ante el comportamiento del alfa castaño

—Debo irme, te veré luego

TaeHyung no espera nada más de SeoJun, se da la vuelta y comienza a trotar hacia el túnel. Niños y niñas juegan por el pasto alto, mujeres y hombres omegas ponen atención a los pequeños mientras algunos alfas cuidan las orillas del bosque desde dentro.

Algo sentía Kim TaeHyung en su cuerpo, una extraña sensación de calor en su sistema que le ocasionaba sentirse preocupado.

Entró al túnel y miró a todas partes. No había nadie.

Caminó un poco por el cerrado espacio hasta que la sensación en su cuerpo se volvió fría repentinamente; se había detenido detrás de la cortina donde se encontraba Jeon JungKook. Confundido, entró al hacer a un lado la enorme tela y miró con duda.

Y ahí estaba. Jeon JungKook, estaba sentado sobre la camilla, tallando sus ojos con lentitud.

—¿JungKook...?

El cuerpo del omega se tensa por un momento para luego girarse hacia TaeHyung. El rostro del omega sigue lacerado y un poco hinchado, pero sus ojos brillan con alivio cuando se posan en el alfa.

—Tae... —susurra, apenas pudiendo hablar sin quejidos—. Estás... estás aquí

Kim TaeHyung no dice nada, siente un alivio tan grande que no pudo evitar caminar hacia el cuerpo del omega y abrazarlo a él con fuerza. JungKook se queja un poco ante la brusquedad, pero su cuerpo se siente seguro y protegido por el alfa, y simplemente, se abraza también a él.

—Maldición... no sabes cuánto me alegra verte despertar JungKook

—Estoy bien —susurra, inhalando el aroma de TaeHyung—. Estoy bien Kim

—Creí que te perdería

Jeon JungKook se separa ligeramente de él para observarlo confundido. TaeHyung sonríe y balbucea en un intento por corregir sus extrañas palabras.