RED LINE ||

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Despues de veinte minutos de trayecto, el taxi se estacionó en la acera frente al hogar de los Downey, después de pagar la cuota Scarlett bajó del auto yendo al portón donde tecleo un código de seguridad para después buscar en su bolso las llaves de su casa, cuando de pronto se percató que un vehículo se habia estacionado detras de ella.

Curiosa giró su mirada encontrandose a Chris Evans bajando de él, le rodó los ojos y siguio concentrada en entrar a la residencia sin poder evitar que el hombre no entrará.

—¡Me fascina tu nivel de discreción!— bufó molesta mientras caminaba por el jardín rumbo a la entrada principal seguida de Chris quien sonreia con ironía— ¡No puedo creer que hayas montado tremenda escena!.

Scarlett dejo la llave puesta en el cerrojo sin abrir, se giró para enfrentarse cara a cara con el hombre quien peligrosamente se acercaba hasta donde ella se encontraba.

— No me gusta compartir lo que es mio— Chris hablo tranquilamente mientras se aflojaba su corbata sin dejar de mirar a la mujer quien sorpresivamente le dio una cachetada.

Chris hizo una mueca mientras con su palma se acariciaba su mejilla que habia recibido tal golpe.

—¡Yo no soy tuya! Ahora largo de aquí— Scarlett gritó molesta pero antes de poderse colar entre la puerta fue interceptada por Chris quien la tomó de sus caderas y la cargó metiendose al interior de la casa con ella.

—¡Sueltame maldita sea!— Scarlett se movía intentando zafarse de la fuerza del hombre pero era imposible.

Chris caminó con ella hasta llegar al comedor que se encontraba en la cocina, la bajo con cuidado y antes de que pudiera escaparse Scarlett quedo atrapada entre la orilla de la mesa y el cuerpo de Chris que la aprisionaba.

Chris se deshizo de su corbata y con rapidez y maestría tomo las muñecas de la mujer y las amarró con su corbata dejando sus manos sobre su espalda.

—¡Estas demente Evans!— Scarlett trataba de zafar sus muñecas pero era imposible, nisiquiera podia girarse porque las manos de Chris la tenian aprisionada, el hombre la tomó de sus caderas y la pego hacia su hombría dejandola sentir lo caliente que se encontraba, aquella situacion lo ponia asi.

Hizo su cabello hacia un lado y comenzó un camino de besos desde la mejilla, bajando por el cuello hasta bajar a uno de sus hombros desnudos, Scarlett poco a poco caía ante las caricias del rubio quien al sentirla relajarse en su pecho fue bajando sus manos para levantar el vestido de la mujer y así subirlo hasta sus caderas dejando ver la fina tooa interior que yacia bajo el.

—¡Por favor suéltame!— Scarlett suplicó pareciendo inconforme, pero mas bien disfrutaba las tormentosas caricias del hombre— Chris...

— Voy a castigarte preciosa— la mujer se sobresaltó al sentir como el hombre mordía su cuello y su hombro mientras sus dedos la penetraban pellizcando su clítoris haciéndola gemir inconsciente— no me gusto nada verte en los brazos de otro hombre.

—¿Quien te crees que eres?— la mujer gimió al sentir el miembro del hombre rozar su trasero, de estar perdida en sus caricias nisiquiera se dio cuenta en que momento Chris se habia bajado su ropa.

—¡Tu amante!— Chris la tomó de sus muñecas y la obligo a acostarse sobre la mesa para así penetrarla de una sola estocada arrancándole un gemido de dolor y placer, apretó las manos de la mujer mientras llevaba el ritmo de las estocadas, estaba furioso de tan solo recordar a aquel desconocido besar los labios de la rubia y ver en sus ojos cuanto la deseaba; se sentía complacido y lo excitaba más al escuchar gemir su nombre y sentir como su intimidad apretaba su miembro haciendo de ese encuentro mas placentero.