15.

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— ¡Feliz navidad Chris! — el hombre se dijo a si mismo, mientras cómodamente se encontraba sentado en la silla principal del despacho de Robert, esa mañana Scarlett seguia durmiendo despues de haberse desvelado viendo películas; habían pasado unos dias maravillosos juntos en aquella casa.

Con cuidado y atención leyó las carpetas que se encontraban en el escritorio pertenecientes al proyecto Casa Blanca y Capitolios, sonreía victorioso pues aquel borrador era lo que necesitaba, solo debia ultimar detalles, cambiarle varias secuencias y despues enviarlo lo más pronto posible.

Tomó las fotos necesarias y después salió de la oficina rumbo a la cocina pues le prepararía el desayuno a la rubia, podria ser sentido de culpa o simplemente adoraba consentirla.

Y eso habia hecho esos dias, ambos cocinaban juntos, veian peliculas, se iban a la cama a llenarse de mimos, tenian sexo, dormian acurrucados, hacían las actividades cotidianas de una pareja de enamorados.

Buscó en la alacena los ingredientes necesarios para preparar panqueques pues la rubia le habia confesado que eran sus favoritos desde niña, por lo que concentrado se dedicó a prepararlos.

Media hora después terminó de llenar la bandeja con suficientes panqueques y café para los dos, antes de emprender camino a la habitación su celular sonó.

—¡Hey Scottie!.

— Hola Chris, sólo te llamó para decirte que hoy llega el pedido que me hiciste mandarte de Londres, exijo saber quien es la afortunada de semejantes regalos de Navidad.

— Creo que pronto vas a saberlo — Chris habló amargamente.

— Bueno, para ese tonito de voz me quieres decir que es la mujer que está casada — Scott suspiró — sal de ahí hermano, te estas enamorando y vas a salir perdiendo.

— ¿Podremos cambiar de tema?.

Scott soltó una carcajada.

— Como gustes, por cierto mamá no se creyó que te varaste en Nueva York por la nieve...

— Pero si hay una tormenta afuera.

— Lo se, pero nunca has faltado a una navidad asi que supone que estas con una mujer y no se lo negué y antes que me lo reproches, lo mereces porque no me dices la verdad, merezco conocer a mi cuñada.

— Y dale con lo mismo Scott, debo dejarte, pero estate atento que tengo trabajo para ti, feliz navidad bro.

Chris colgó la llamada y emprendió camino a la habitación de Scarlett encontrandola todavía dormida acurrucada contra la almohada que él le habia acomodado.

Sonrió al verla tan tierna y vulnerable, a pesar de todo lo malo que estaba haciendo no podía negar que habia caído perdidamente enamorado de ella.

Se habia enamorado de la esposa de su ex mejor amigo, la persona que más odiaba.

"Maldito karma hijo de puta".

A pesar de ese obstáculo lucharia por ella, estaba dispuesto, pues jamás se había enamorado de una mujer, jamás nadie se habia impregnado en su corazón como ella lo habia hecho.

Dejo la bandeja con el desayuno sobre la mesita y se acercó a ella despertandola dejandole dulces besos en la cara y haciendole cosquillas.

—¡Despierta bella durmiente!.

Scarlett aún somnolienta se echo a reir moviendose en la cama tratando de escapar del hombre que la tenia completamente acorralada.

— Chris un rato más, hoy es navidad, hoy podemos desvelarnos.

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