RED LINE ||

19.

Greg Johansson se mostraba pensativo sentado frente a su escritorio el cual estaba repleto de cuentas bancarias, documentos y números sin fin, además de las fotografías comprometedoras que tenía, no le cabía en la cabeza aquella información.

—  Eres un hijo de puta Robert — el hombre decidió guardar aquella evidencia y mandar a hablar a su investigador privado y a su abogado para cambiar el testamento, de ser verdad todo esto que aquella mujer le había proporcionado tenia que salvaguardar el patrimonio de su hija y alejarlo de aquel infeliz.

Después de hablar con su investigador llegaron al acuerdo de que esperara a enfrentar a su yerno hasta que tuviera las pruebas suficientes y veridicas.

~

Robert llegó a California la noche de aquel Viernes, nisiquiera se habia molestado en cargar alguna maleta, esta vez solo había ido a aquella ciudad a terminar su relación con Virginia y a quitarle todo lo que él le había regalado.

La rabia que sentía por dentro lo estaba acabando, su mundo prácticamente se había derrumbado, pues para él Virginia era lo único bueno que tenia en su vida.

Bajó del taxi frente al edificio donde Virginia se encontraba, subio al elevador presionando el botón del piso correcto mientras revisaba su celular donde tenia mensajes de su esposa avisándole que partiría a Manchester dias antes de lo previsto.

— Disfruta de los pocos días de felicidad que te quedan querida — el hombre murmuró mientras texteaba a la mujer deseándole un buen viaje.

— Si el estaba sufriendo, era hora de que Chris sufriera.

Salió del elevador yendo al apartamento el cual abrió con su llave recordándose mentalmente que debia poner a la venta aquel lugar, entró a la sala siendo recibido por la mujer quien lo miraba seria.

— Hola Robert.

— Virginia — Robert decidió plantatse frente a ella mirandola a los ojos — ¿De que querias hablar?.

Virginia abrió la boca sorprendida, podía notar la frialdad que emanaba del hombre que amaba, quiza su suegro ya habia hablado con él, quizas no.

— De nuestro hijo amor — Virginia trato de sonreír— él no tiene la culpa de nuestra situación, pero es importante que nazca en una familia unida, sus padres juntos, por favor deja a tu esposa.

Robert apretó sus puños tratando de mantener la calma, pero cada vez su enojo crecía sintiendo el impulso de hacerle pagar aquella traición.

— No quiero, ni necesito ese niño, fui claro contigo — Robert comenzó a caminar por aquella habitacion, podía sentir la mirada de la mujer seguirlo — tienes que deshacerte de él.

—¿Te volviste loco?.

— Bueno, si no vas a abortarlo, esto se habrá terminado Virginia.

Virginia llevó sus manos a su boca tratando de calmarse, no podía creer lo que estaba escuchando.

— Puedes quedarte con la casa de Vancouver y tus negocios de aqui, pero lo demás deberás regresarmelo.

— ¡Eres un imbécil! — Virginia se dejó ir hacía el hombre golpeandolo con furia — no sabes lo que te espera.

—¿Eso es una amenaza? — Robert la tomó de sus hombros estrujandola con violencia —¡ tu no sabes con quien te metiste, zorra traidora!.

Virginia podía sentir la furia de Robert, pero no le tenia miedo.

— ¡Vas a hacerte cargo de tu hijo, quieras o no!.

— Ese niño no es mío.

—¡Lo es!— Virginia logró zafarse del hombre para después propinarle una cachetada provocando que la furia del hombre se desatará.