Capítulo 16

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Cárter

Me dirija a la casa de mi hermana, porque mi mamá estaba demasiado enojada y yo también.

La llamada que habíamos tenido me había sacado de mi paz de fin de semana.

Era imposible que mi hermana hubiera tenido algo que ver con el idiota de mi primo que es un mujeriego de lo peor, no por nada tenía una fama que cuidar en la escuela.

Los cuatro primos estábamos en la misma escuela, éramos de edades similares así que compartimos instituto, yo era el único serio de nuestro grupo de amigos.

Teníamos una regla, no meterse con la familia.

El incesto no nos asustaba, la abuela se había enamorado de su medio hermano y mi tía abuela de su primo hermano, así que eso no nos daba miedo no era mal visto por la familia. Al contrario así no tenías que hacer méritos para entrar en la familia y en la casa de la abuela.

Lo que me tenía molesto era que mi estúpido primo había jugado con mi hermana y por eso había tomado esa decisión tan radical de venir a estudiar a Canadá.

Cuando llegue al edificio solicite el permiso para subir al apartamento el cual Sofia me lo dió porque mi hermana no estaba, eso me angustiaba, porque de verdad tenía que hablar con ella.

Al salir del ascensor me sorprendió ver a mi primo metiendo la lengua en la boca de mi hermana, lo que me hizo enfurecer y terminar arruinando su cara bonita.

Eso me llevo a casi ahogarme con agua, no sé cómo pasó, solo me estaba tragando como medio litro de agua y estaba empapado. Sofia me metió a la casa y me sentó en el sofá.

—¿Se puede saber porqué le pegabas a ese pobre mortal?— ella estaba frente a mi con la mano derecha en la cintura como si fuera mi madre cuando me regañaba por portarme mal en el colegio.

—Él es un idiota y no debe estar cerca de mi hermana.

—Yo creo que ella lo podía manejar.

—Yo no lo creo— le di una mirada de desaprobación y me quite el cabello mojado de la cara.

—Lo siento por tirarte agua, trataba de separarlos; peto eres más grande y pesado— eso lo entendía, sino me hubiera aventado agua en la cara al punto de ahogarme seguiría haya fuera partiendo le la cara a mi primo adorado.

—No te preocupes, hiciste lo que tenías que hacer.

—Bien, ve a bañarte, te daré ropa seca para que no te vallas a enfermar y no sigas mojando mi sillón— señaló el respaldo del mueble que estaba mojado y se dió media vuelta para perderse en su cuarto.

Era increíble que mi hermana siguiera haya fuera hablando con ese imbécil, quería volver a salir y hacer que se metiera; pero no podía complicar más las cosas.

Sofia me trajo una muda de ropa de hombre, lo cual me sorprendió; sin embargo no pregunte de quién era.

Cuando salí del baño vestido y seco, mi hermana estaba en la cocina hablando con Sofia, me acerque lentamente a ellas que en cuanto me vieron se callaron.

—Mamá está muy enojada, te recomiendo que la llames— le dije a mi hermana tomando mi teléfono que había dejado en la mesa de la sala antes de irme a bañar.

—Cárter, lo que viste fue un error— me di la vuelta para verla a la cara mientras me hablaba.

—Ya lo sé todo— la cara de mi hermana fue de sorpresa, shock, decepción y tristeza.

—¿Quien te lo dijo?— susurro por lo bajo.

—Ashley se lo dijo a la familia en el desayuno familiar de la abuela y al ver que Edward había viajado hacia Canadá, no había la menor duda en que entre ustedes había o hay algo.

—Entre él y yo ya no hay nada— su mirada era firme como si quisiera convencerse a sí misma de que lo era.

—Yo no soy nadie para juzgarte, Samantha; pero me hubiera gustado que me lo contarás. El engañar a mamá lo entiendo se que ella no maneja bien el tema, pero yo te hubiera escuchado y apoyado.

—Yo lo sé, solo que tenía vergüenza y miedo.

—Nunca haría nada que te lastimaste, solo debiste haber tenido más confianza en mi—. Ella asintió con la cabeza y me abrazo. -Sino llamas a mamá ella vendrá a regañarnos por lo que hiciste.

—Lo haré más tarde.

Solo que Sam no lo hizo y la amenaza de mamá se había cumplido.

Me encontraba en el aeropuerto para recibir a mamá, la hospedaria en un hotel cerca del campus y de la casa de Sam.

A mi madre no le causó mucha gracia que mi hermana se quedará con tres extrañas en una sola casa teniendo el dormitorio en el campus, así que iría a revisar que todo estuviera bien con ellas.

Y en cuanto a mi, William me había ofrecido mudarme con él en el piso inferior al del departamento de las chicas, tendría más comodidad y espacio.

Cuando el avión de mi mamá aterrizó me puse atento para recibirla, el único detalle es que mi madre no venía sola, venía con mi ex novia.

Quiero amarte [Libro 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora