Quiero amarte [Libro 1]

Capítulo 47

Sofia.

Cuando baje del avión con una mochila con un cambio de ropa no me sorprendió encontrarme con la desilusión de regresar a mi país, este lugar era dueño de mis mas grandes miedos y decepciones y no me hacia mucha gracia volver solo para enfrentar un problema que no sabia ni de donde se había creado.

Pase el resto de la noche en la casa de mi tía que me había ido a recibir al aeropuerto, y me encontraba en mi antigua habitación hablando por mensaje con Cárter.

Cárter: Te extraño y solo unas horas que te fuiste.

Sofia: Lo se a mí me pasa lo mismo; pero, solo serán dos

días y me tendrás de vuelta para sacarte de tus casillas.

Cárter: Cuento las horas para tenerte entre mis brazos.

Sofia: Te quiero.

Cárter: Te amo.

Apoye el celular en mi pecho y algo dentro de mí se movió al leer esas dos palabras que me habían ilusionado hace tanto tiempo y ahora me aterraban al saber que Cárter no sabía nada de mí y prefería que fuera así.

Al día siguiente me levante muy temprano para ir a las oficinas del abogado y al llegar me dejaron pasar de inmediato.

-Bienvenida señorita Mendoza- me recibió con un cordial saludo de manos el abogado. -Por favor siéntese- me señalo las sillas frente su escritorio.

-Gracias señor Hernández.

-Solo dime Carlos- me dedicó una sonrisa enorme y en otros casos la hubiera correspondido de no ser porque mis nervios me traicionaban y no podía centrarme en otra cosa que no fuera la demanda.

-¿Podemos ir al grano?

-Claro- me dijo acomodándose en la silla y ofreciéndome un papel. -Hace un mes el señor Sergio Ortega presento esta demanda en su contra con el motivo del incumplimiento del contrato prematrimonial emitido hace 6 años por él y firmado por su madre- leí el papel sin entender muy bien de que se trataba y lo mire fijamente al mencionar a mi madre.

-¿A qué se refiere con eso?

-Su madre y el señor Ortega firmaron el contrato dos meses antes de su accidente y en este se estipulaba que ustedes contraerían matrimonio dos semanas después, como sabe el señor Ortega es un gran empresario y no se iba a arriesgar al escandalo provocado por el degrado que tuvo. Así que prefirió ignorar el contrato dando una fuerte cantidad de dinero a su madre para que no lo involucraran en nada referido a usted.

Estaba en shock al saber de lo que era capaz mi madre con tal de salirse con la suya. La rabia hacia ella era incomparable con cada palabra del abogado.

-Después de su accidente el señor Ortega se caso con la hija de uno de sus socios con la que vivió 5 años y tuvo dos hijos; sin embargo, hace dos meses se divorciaron dejando a los menores al cargo de él y la prensa no lo tomo muy bien al juzgarlo como padre soltero- el abogado tomo una pausa para evaluarme y continuo. -Es por eso por lo que estipulo esa demanda contra usted, haciendo valer este contrato y exigiendo que su madre le regresara el dinero con el que había comprado su silencio.

-¿Mis padres que dicen de todo esto?- pregunte limpiándome una lagrima bruscamente del ojo.

-Su padre no se ha querido involucrar y su madre dice que no va a pagar nada- me miro unos momentos antes de agachar la cabeza, era obvio que hasta él sentía pena por mí.