Ambos bajamos del auto una vez que habíamos llegado a casa, nos habíamos quedado por la mañana ahí para disfrutar un rato de la soledad de estar juntos. Él se acercó a mí y yo solo bufe, no quería volver. Quería quedarme con él en ese lugar. Detestaba la manera en que me estaba volviendo tan dependiente de él.
- ¿Qué? – me observo preocupado
- ¿era necesario volver? – susurre
El asintió apenado, me abrazo por los hombros e intento que caminemos hacia la puerta lentamente. El también estaba algo molesto por volver a la realidad nuevamente. Al ingresar nos separamos con rapidez frente a Clemencia y a Laura que se encontraban saliendo de la cocina.
- Hola – sonrió clemencia
- Hola – susurramos ambos
- ¿Cómo estuvo su noche? – bromeo
Ambos nos observamos con los ojos abiertos, con gran sorpresa. ¿Clemencia se había dado cuenta que había algo entre nosotros, algo demasiado fuerte?
- Am, bien – hablo Juan Pablo asintiendo
- Si, la lluvia nada más fue como
- ¿tenebrosa? – pregunto Laura con el ceño fruncido de forma divertida
- Si – rápidamente Juan Pablo contesto
- Ah – murmuro clemencia
- Creo que iré a ver a Sam – comente y voltee hacia la puerta
- Y yo iré a ver a los chicos – Juan Pablo me siguió
- No vuelvan tarde – clemencia grito una vez que ambos salimos – los espero para la cena
Cuando juan pablo cerró la puerta voltee a observarlo con curiosidad. El también tenía el mismo rostro que yo, ¿éramos nosotros o era tan notorio todo y clemencia se ocupaba de juntarnos un poco más?
- Te acerco – susurro y se acercó a besar mi coronilla primero para luego besar mis labios tiernamente
(...)
- ¿Qué?
Lizet abrió con sorpresa sus ojos y su boca, note que la torta que comía se cayó a la mesada.
- Qué asco – murmure observando el pastel de chocolate estrellado
Sam comenzó a gritar con gran locura y se acercó a abrazarme con fuerza. Ahora se comportaba como una loca al saber que con Juan Pablo estuvimos juntos y que yo había perdido mi virginidad con él.
- No puedo creerlo – Sam beso mi mejilla con emoción – estoy tan feliz por ambos
- Espera – Lizet se ponía seria y hacia tranquilizar a la peligrosa – hay algo importante que saber aquí
- ¿Qué? – ambas fruncimos el ceño confundida
- ¿se cuidaron?
Abrí mis ojos con sorpresa, Sam me observo fijamente. Pequeño gran detalle que en la noche de lujuria no lo habíamos tenido en cuenta.
- Lía – Sam golpeo mi brazo
- Disculpen, no sabía – murmure - ¿estoy en problemas?
- Si es que no te nace un bebe, no – hablo Lizet comiendo de su pastel
¿Un bebe? Ay no, esto era peor de lo que pensaba. ¿Qué haría yo con un bebe? No tenía nada y juan pablo ¿me dejaría?
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¿Que sabrá Neruda? - Juan Pablo Villamil
Fanfiction¿Que sabrá Neruda lo tanto que me gustas?, ¿qué sabrá? Si tan solo escribe y no sabe que te quiero. No sabe que me encanta verte llorar, que me encanta verte soñar. Neruda simplemente no sabe lo que me encantan tus labios al hablar. ¿Qué sabrá Neru...