AriZona (Luke Hemmings)

XXI. Puzzle

•Audrey & Luke•

Reece no estaba. Había ido a casa de uno de sus compañeros, ni siquiera había llegado a casa. Ante la ausencia del menor y el momento incómodo los jóvenes se plantaron en la barra de la cocina, con el estéreo encendido en la sala, botanas y refrescos junto a ellos.

—¿Por qué hacemos esto? —preguntó Calum intentando colocar una pieza en un espacio frente a él.

—No hay nada bueno en la tele y encontré esto en el cuarto de Reece.

—¿Me pasas aquella pieza roja con azul? —pidió Luke metiendo una papa a su boca.

—I'm finding me out. I'm having my doubts,
I'm losing the best of me. —Calum canturreó pasándole la pieza a Luke.

—We're all part of the same, sick little games. —cantó Audrey acomodándo más piezas, una tras otra.

—And I need a get-away. I'm wasting my days. —continuó Luke tomando mas papas.

—I throw them away, losing it all on these sick little games. —terminaron a coro los tres chicos.

—Deberíamos hacer una banda. —dijo Calum después de eructar por haber tomado refresco.

—No seas torpe. —Audrey sonrió y seguido de eso la puerta de entrada fue abierta y cerrada con sigilo.

—Alguien...

—Es mi mamá. —respondió Audrey después de haber interrumpido a Luke. —Al fin conoceras a mi mamá. —con los dientes frontales superiores mordió su labio inferior para después abrir sus ojos en par en par, demostrando emoción al respecto.

—Chicos. —susurró la mujer en tono cansado desde la sala. —Oh, me gusta esa canción. —Calum, Audrey y Luke se levantaron de sus lugares y salieron de la cocina.

—¿Cómo te fue? —preguntó Calum sentándose a lado de la mujer en el sofá.

—Bien, cariño, gracias. ¿Podrían repetir esa canción? —Audrey sonrió y tomó el control del estéreo y repitió la canción. —Reece creció demasiado y se tiño de rubio ó...

—Él es Luke. —interrumpió Audrey.

—Es un compañero mío de el Instituto. —explicó Calum.

—Luke Hemmings. —sonrió el rubio tendiendole la mano.

—Thereza Brisebois. —la mujer respondió a la presentación estrujando la mano del rubio. —¿Y Reece?

—Está en la casa de uno de sus compañeros, Calum y yo iremos a las ocho por él.

—Perfecto. —parpadeó lentamente. —¿Hija?

—¿Si?

—¿Tienes cigarrillos de yerbabuena? —Luke notó que Audrey abrió en demasía sus ojos en dirección a Calum, pero no de la forma graciosa de hacia un rato.

—No. —respondió la chica sin dejar de mirar a Calum. Thereza bufó.

—¿Podrías darme uno de lo que sea que tengas? —la chica mordió sus labios y corrió hacia las escaleras. Luke cuestionó a Calum con la mirada, el chico rodó los ojos en dirección a la cocina, Luke asintió y volvió a la cocina, después Calum entró.

—¿Por qué...

—Audrey se puso nerviosa. —contestó el moreno. —Se puso nerviosa porque Thereza no suele fumar a menos que le vaya muy mal en su trabajo.

—Oh.

—Si tanto quieres a mi hermana se paciente con lo que pueda pasar en un futuro con Thereza. —advirtió el moreno.

—Pero...

Calum le hizó una seña con la mano para que guardara silencio, segundos después Audrey pasó corriendo frente a la puerta de la cocina con ese leve sonido de agitación proveniente de sus labios. Calum y Luke escuchó el ligero murmullo de la corta conversación de Thereza con Audrey