XIV. Happy Pills

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•Audrey & Luke•

-Te traje esto. -Luke le tendió la bolsa de la farmacia a Audrey quien la miró con desagrado.

-Ni creas que voy a medicarme por un torpe dolor de cabeza. -Audrey recibió la bolsa pero la dejó en la cama alejada de ella.

-No planeo que te mediques. -respondió el rubio.

-Entonces no le veo el caso a que me hayas traído algo de una farmacia.

-Tienda/farmacia. -corrigió el rubio.

-Es la misma mierda. -bufó.

-Sólo abre la bendita bolsa. -señaló la bolsa y Audrey rodó los ojos.

(...)

-¡Eran gomitas! -exclamó la chica metiendo otra de esas bolitas azucaradas entre sus labios.

-Nota mental: Te conquistare con dulces. -habló Luke metiendo unas bolitas de algodón de azúcar a su boca.

-Ya me la has dicho, ya no es nota mental.

-Fue para anunciarte como te conquistaré, concretamente no fue una nota mental.

-¿Luke?

-Audrey.

-¿Recuerdas lo que iba a contarte ayer que me subiste a mi cama? -Audrey adoptó un tono serio.

-Si.

-No he hablado en mucho rato de eso con nadie, y en verdad me es difícil...

-Me gusta tu cabello rosa pastel. -interrumpió Luke.

-No me cambies el tema, realmente no me siento comoda hablando de...

-¿No has pensado en teñirlo de morado? -volvió a interrumpir.

-¡Luke! Me es raro hablar de esto con alguien más y tú te la pasas interrumpiendome!

-No necesito saber nada a cerca de lo que te haya lastimado. -Luke alzó la vista y miró fijamente los ojos de Audrey.

-¿Cómo sabes que me lastimó? -preguntó ella con los ojos brillosos y la voz pesada.

-Me lo estas diciendo con tristeza.

-Pero quiero hablarlo. -murmuró.

-¿Estás lista para hablarlo es este momento? -ella negó con la cabeza. -Entonces cuando lo estés yo te escucharé, no necesito saberlo y no necesito verte llorar.

-No lloraré.

-¿Los ojos se te suelen llenar de lágrimas cada que hablas con chicos que te han traído dulces para consentirte? -ella sonrió con pesar.

-No.

-Vale, gracias por aclarar mi duda.

-Gracias.

-Por nada.

Se quedaron mirando los ojos del otro por unos segundos que se antojaron horas.

-No pienso apartar la vista. -avisó Luke.

-Yo tampoco.

-Te traje AriZona.

-¿Dónde? -Audrey apartó la vista y Luke soltó una carcajada. -¿No me has traído ningún AriZona, verdad?

-Si lo he hecho. -Luke sacó de su mochila dos latas del AriZona de ponche de frutas, le tendió una a Audrey y se dispusó a abrir la otra.

-No la abras. -ordenó la chica. -Guardala para otra ocasión, tomaremos de una. -abrió su lata, le dio un trago y luego se la tendió a Luke.

-Me fascinas aún mas con tus propuestas románticas. -Audrey se sonrojó.

-¿Vendrás mañana?

-¿Quieres que venga mañana? -ella asintió. -Vendré mañana. -afirmó.

-¿Volverás a mi cuantas veces te lo pida?

-No me iré si es necesario.

-Romántico empedernido.

-Demasiado pero sólo contigo.

AriZona (Luke Hemmings)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora