****************El teléfono de Jungkook no había parado de sonar durante lo que restó de la semana. Eran principalmente mensajes de distintas personas invitándolo a una fiesta que pronto estaría por celebrarse.
De hecho, ese mismo día al anochecer.
El castaño le había explicado que se trataba precisamente de una celebración por el cumpleaños de Lee Taeyong, el mismo tipo que lo había llamado hace un par de días. Había sido prácticamente implícito que Kook no iría.
Además, parecía irritarse demasiado con la sola mención de la fiesta. Incluso había lanzado a cualquier parte las dos invitaciones que llegaron al apartamento el día anterior.
Jimin quería ir.
La curiosidad y las terribles ganas de querer saber quiénes solían formar parte de su "círculo" de amigos, lo tenía inquieto. Solo le gustaría verlos, observar cuál era su comportamiento y personalidades para darse una simple idea de ello.
Pero sabía que tal vez era una mala idea el siquiera mencionárcelo a Jeon. Él lucía reacio a la sola posibilidad de ir.
Y no es como si él estuviera entusiasmado también, pero era solamente curiosidad.
Así que, apenas se despertó aquella mañana, entre los cálidos brazos de su novio, se había decidido a preguntarle por aquella fiesta. Luego de una rápida ronda de mimos y un dulce placer, ambos tomaron desayuno. Uno ligero en realidad, ya que el estómago de Jimin había estado descompuesto recientemente.
A pesar de que el rubio se había negado a ir al doctor, Jungkook se las arregló para traer uno a casa. Al parecer, y según el experto en medicina, Jimin era intolerante a la lactosa. Cosa rara siendo que siempre había adorado la leche y nunca le había caído mal hasta ese momento.
De cualquier forma, las náuseas y su mal estado en general, habían mejorado notablemente con el paso de esos días.
Volviendo a la actualidad, el rubio estaba completamente vestido, limpio y hambriento otra vez. Por su bien, no comería más de lo debido. Observó a Jungkook, quien había decidido tomarse unos cuantos días libres a raíz de la pequeña dolencia que aquejaba a su bonito chico. El castaño estaba ocupado revisando estadísticas y planos con muchísimos numeritos que poco o nada le interesaba leer. Jimin tenía la cabeza asomada por la puerta de la habitación. Le había dicho que no lo molestaría, aunque Jeon le había pedido explícitamente que prefería tenerlo al lado.
- ¿Sabes que puedo verte, no es así?- preguntó el mayor, levantando la mirada hacia él.
El rubio asintió, muy despacio.
- ¿Te sientes mal de nuevo?- el castaño arrugó el entrecejo, dejando los planos a un costado.
Jimin negó con la cabeza, sin moverse de su lugar.
Parecía un niño pequeño.
Jungkook frunció el ceño todavía más, caminando hasta llegar a su lado. Puso una mano sobre su frente, le tocó las mejillas y escuchó los latidos de su corazón. El menor se dejó hacer sin rechistar.
- Creo que... necesitas un beso~- sonrió, depositando uno sobre sus labios.
Jimin no pudo evitar sonreír, mucho menos corresponder aquel beso que terminó por durar un par de minutos más del que debía originalmente. El rubio estaba a punto de dejarse llevar cuando recordó el principal motivo de su presencia allí.
Se apartó con suavidad, permitiendo que Jeon acariciara su cintura al separarse.
- Sé que tienes algo que decir- sonrió, apretándole la nariz levemente- No eres de los tímidos, Park~. Veo que Jeon Jungkook ha ocasionado un gran efecto en ti~- sonrió pícaro.
ESTÁS LEYENDO
Ma Sweet Boy- #KOOKMIN- #M-PREG
Fanfiction"Jimin y Jungkook deberán lidiar con los estragos del compromiso que se les fue impuesto. La diferencia de edades y sus particulares personalidades, les impiden llevarse bien en un principio; ocasionando discusiones y peleas constantes en el proceso...