Bueno, en este libro se hallan escritos 31 relatos, uno por cada día del mes de octubre. Todos los personajes le pertenecen a Tolkien y son tomados de su legendarium. ¡Espero sean de su agrado! ✨
El presente libro participó en el concurso Fictober T...
Nerdanel «La Sabia» era una Elfo fuerte de cuerpo y mente, pero la profecía de Aulë la marcó para siempre: "La rebelión, en su fin, sólo guiará a Fëanor y a tus hijos a su muerte." Por más que trató de persuadir a su esposo de quedarse en Aman, él la llamó una «traidora» y, cegado por la ambición, la abandonó. Las noticias de las muertes no tardaron en llegar, primero Fëanor, y luego, uno a uno, sus hijos.
Habitaba en la ciudad de Tirion con su padre, Mahtan, un herrero. Cansada y escasa de inspiración para lo que más amaba, Nerdanel decidió ir a la bahía de Eldamar para reflexionar. No obstante, una figura mucho más alta que el más alto de todos los Eldar se apareció ante ella.
"Mi Señora Nienna." Hizo una reverencia a la Valië, quien vestía un enorme manto grisáceo.
"Nerdanel, hija de Mahtan, presta oídos a mi consejo; debes liberar tu mente, así como tu corazón, de toda dolencia y sufrimiento que ahora mismo te atormenta." Sollozó Nienna; su rostro era cubierto por su capucha. "Crees estar bien, pero en el interior no has sanado por completo."
"Lo lamento, mi Señora; si aún no lo hago es porque tengo esperanza de que ellos regresen." Sonrió débilmente.
"De Mandos, ¿dices?"
"En efecto."
"¿Y qué harás si no regresan? ¿Qué sucederá con aquella esperanza?"
La Elfo bajó la mirada.
"Nadie puede salir de Mandos sin antes ser juzgados por las acciones que en vida cometieron..."
"¡Entonces yo misma he de ir ante el Vala Námo y liberar a mi familia de aquel destino maldito!" Nerdanel exclamó exaltada.
Nienna parecía permanecer inmutable, pero una brisa sopló y su capucha gris cayó revelando su pálido rostro, además del río de lágrimas que se dibujaba desde sus ojos hasta su mandíbula. Cada gota aterrizaba mojando su manto gris.
"¡Mi Señora! Perdóneme..."
"Recuerda la Señora de qué soy, y entenderás la razón de las lágrimas que derramo. La Estrella y las Llamas de la Casa de Fëanor casi han desaparecido por completo." Padeció Nienna, «Señora de la Pena y la Compasión», la encargada del luto, haciendo referencia a las vidas de Fëanor y sus hijos. "Lloro lo que tú no has llorado, querida."
Y como por arte de magia, las lágrimas brotaron de los ojos de Nerdanel.
"Istarnië, hija de Mahtan, esposa de Fëanáro, madre de siete hijos; eres una mujer valiente, firme e intrépida, y has olvidado que el llorar por aquellos a quienes amas no te hará débil."
¿Istarnië? Hacía siglos que no escuchaba aquel nombre, pero poco le importó. Sollozaron sin descanso, Nerdanel a lo alto y Nienna en silencio. Liberar el dolor no le regresaría a sus hijos, pero lograría hacer las paces con las muertes de ellos. Los rojizos cabellos de la Elfo hicieron contraste en el gris regazo de la Valië cuando buscó consuelo, y así lloraron por lo que pareció una edad entera.
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notas: 1. la imagen pertenece a @mahpiya-luta en tumblr.
