Narra lucia.
Estaba eligiendo el vestuario con Gloria Trevi. Ella me parecía genial. Me dio algunos consejos para calmarme y mantener los nervios controlados a la hora de cantar.
-¿Y quién es el mayor? ---preguntó "la trevi" mientras miraba unos vestidos.
-El mayor es Joaquín, tenemos seis años de diferencia. ---dije y ella rió.--- ¿Puedo preguntarte algo? ---dije y ella asintió.---¿No te duelen la cabeza y el cuerpo después de tantos bailes, saltos, gritos y trucos?
Me miró con expresión divertida, se rió y respondió.
-Bueno, al principio sí. ---admitió--- pero luego te acostumbras..., aparentemente eres tú quien le grita a tu hermano ---ambas nos reímos--- deberías acostumbrarte, eso es todo cuando haces eso, serás imparable.
La puerta del camerino se abrió para revelar a una mujer de cabello negro y ojos un poco achinados, no era demasiado alta y era un poco morenita. Aunque, a decir verdad, su piel se veía muy linda...
Miró a gloria, le sonrió y se acercó. Al parecer nisiquiera notó mi presencia.
-Hola Ana, hermosa noche para cantar. ---dijo Gloria--- Uhm, ella es Lucía Galán. ---Me presentó y le sonreí.--- Es un poco nueva, ya sabes la canción: olvídame y pega la vuelta.
Ana y yo nos miramos a los ojos durante unos segundos, aparentemente un brillo se hizo presente en los suyos, pero luego desapareció.
-Hola Lucía ---sonrío.--- Bienvenida al negocio, espero que sepas cantar.
Ese comentario me confundió un poco, sonó algo ¿grosero? No lo sé, pero me incomodó mucho.
-Uhm, bueno, gracias. ---Traté de sonreír, pero solo logré hacer una mueca.
En ese momento se abrió la puerta, dejándonos ver a Verónica Castro, quien sería la presentadora, entró y cerró la puerta y nos dio una sonrisa.
-Hola chicas ¿cómo están?
-Hola vero ---dijimos gloria y yo.
-Hola hermosa.
Al escuchar esto, miré a Ana y luego a Vero, quien se sonrojó mucho y luego le guiñó un ojo.
-En cinco minutos comienza el espectáculo ---nos informó--- por favor, ya estén listas. Gloria tu sales primero.
-Lo estaremos ---aseguró.
Vero asintió y salió del lugar, Gloria agarro sus prendas y fue a vestirse, dejándome sola con ana, quien comenzó a peinarse.
Decidí comenzar a prepararme, solo necesitaba un poco de rímel y lápiz labial. Solo había un espejo, así que tuve que ponerme atrás de Ana, no parecía importarle mi presencia.
Necesitaba verme más de cerca así que comencé a acercarme un poco más. Todo estuvo bien hasta que perdí el equilibrio y caí encima de Ana provocando que el brillo que se estaba poniendo manchara su mejilla
¡Lo siento mucho!---dije casi en un grito mientras trataba de limpiar su mejilla, gran error ya que tenía mi labial -color rojo- y manché su mejilla aún más.
-Agh, dios sal, déjame.
Apartó con brusquedad mi mano y trato de limpiar su mejilla, pero el rojo carmesí no salía, se veía más fuerte.
-¿Ese labial es duradero? ---preguntó entre dientes. Estaba enojada, al parecer.
Miré el lápiz labial y me mordí el labio cuando vi el "permanente por 48 horas". Quería que la tierra me tragara o salir corriendo. Parecía que Ana me iba a fulminar, seguro que quería golpearme.
-Lo siento ---dije avergonzada por mi estupidez--- podemos disfrazarlo con maquillaje, ¡sí! Eso podemos hacer... déjame buscar mi base, te va a quedar bie..---Cuando saqué el frasquito de mi base, no me percaté de que estaba destapado provocando que todo el líquido cayera sobre el vestido de Ana.
Fui testigo de como sus ojos se abrieron y con la ayuda de sus perfectas cejas frunció su ceño.
-Lo sien...
-Por favor, ya cállate.
-Ana Gabriel, después de Gloria Trevi, es tu turno.---escuchamos que dijo un hombre detrás de la puerta.
-Me voy chicas, deseen me suerte. --- dijo Gloria saliendo corriendo del vestidor.
Ana entró al camerino y luego salió con el vestido, era de un color blanco un poco ajustado a la cintura y largo hasta las rodillas, justo en el pecho estaba esa mancha marrón.
-¡Me queda horrible!---dijo con desesperación, mientras seguía intentado sacar la mancha roja de su mejilla.
Mis ojos vagaron desde sus pies a su cabello, de su cabello a sus ojos y de sus ojos a sus labios.
-Lo siento, yo... yo no quise arruinar tu vestido ---dije con desgano.--- ni tu maquillaje.
Ella no me respondió, solo siguió tratando de quitar la mancha marrón de su vestido con una servilleta. Mis ojos curiosos se posaron en sus pechos, parecían grandes y redondos... de nuevo miré sus labios e inconscientemente mordí los míos. Sentí un calor correr por mi cuerpo y cuando me di cuenta de lo que estaba haciendo, mis ojos se abrieron y salí del vestuario lo más rápido que pude.
-Lucia ---escuché detrás mío, era joaquín.--- después de Ana gabriel, seguimos.
-Lo sé ---dije tratando de acomodar mis pensamientos.
-¿Te pasa algo? ---preguntó.
¿Que le podía decir? "Nada hermano, sólo que arruine el maquillaje y el guardarropa de mi compañera de camerino y luego miré sus pechos. Algo de todos los días". ¡NO!, debía inventar algo que suene convincente.
-E-Estoy nerviosa..? ---dije dudando.--- ¡sí!, es eso, nervios.
Continuara...
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Es el amor quien llega
FanfictionSi miras las estrellas buscando un no sé qué. Si sientes que tus ojos se humedecen sin querer. Si notas que el calor , te viene a golpes de tensión. Y pega fuerte, fuerte, fuerte... Entonces, mucha suerte. -una novela entre Lucia Galán y Ana Gabrie...