Capítulo 22

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Lo que más me sorprende de los lunes, es el ambiente taciturno que invade la escuela. Quedan dos semanas de clases, pero el inicio de semana sigue siendo aburrido y pesado. El director hace un anuncio sobre la graduación, resulta que los boletos se han terminado.

Debería estar más emocionada por el término de esta etapa, la realidad es que es mayor mi emoción por descubrir quién está detrás de la revelación de mis videos. Sin embargo, también me carcome el miedo, no quisiera pensar que alguien cercano a mí fue capaz de hacerme eso. Dentro de la gente cercana solo está Demi y mi hermano, ninguno de ellos es capaz de hacerlo.

A la hora del receso, me encuentro a mi hermano sentado en una banca, parece esperar a alguien. Me dirijo hacia allá, cuando una figura llega corriendo y se abalanza hacia él. Se abrazan y luego se besan. Oh, vaya, claro que mi hermano puede tener novia, no debería ser incómodo...pero lo es. Una vez que se separan, veo a Sandra, está tan radiante como una rosa. Ya sabía que se traían algo.

―Quién diría que tendrían novio al mismo tiempo.

Demi llega de improviso y me saca un susto. Observa a la pareja quienes se toman de la mano y se alejan hacia el patio principal, casi con confusión. Demi sabe de André, sabe todo desde el día del hospital, cuando lo corrieron mis papás, lo primero que hice fue marcarle a Demi para desahogarme con ella.

―Yo habría elegido a otra, no a Sandra.

―¿Otra como quién?

No lo sé, alguien alegre, inteligente, alguien que no sea atleta. El ser atleta no impide ser alegre o inteligente, ni siquiera conozco mucho a Sandra, pero desde que mi hermano me contó que ella aceptó salir con él solo para enterarse de mi chisme, cayó de mi gracia. En fin, solo me encojo de hombros, lo importante es que a él le haga feliz.

Nos sentamos a una banca mientras me cuenta con lujo de detalle lo ocurrido durante el examen de admisión. No es cosa fácil, debo admitir, son tantos los aspirantes, que las universidades tienen que hacer un filtro para aceptar únicamente a los mejores. Yo incluso, que estudié y me preparé mucho, sufrí en varias preguntas. Me imagino que esta segunda vuelta fue incluso más difícil. Amo a Demi, pero debo admitir que no se preparó tanto porque no estaba en sus planes aplicar a ninguna universidad.

―¿Y qué opinas de este?

Después del testimonio sobre el examen, me muestra fotos que sacó de "chicos guapos", uno de ellos tiene una nariz más grande que el rostro, otro sale borroso, una de las fotografías con mejor calidad tiene como protagonista a un chico de cabello azul, lacio. Ese no está tan mal. El que me enseña ahora, es un ser humano que no se ve todos los días, es tan guapo, que ni David puede con él. Claro, el de la foto es un hombre adulto, universitario, responsable y tiene barba. David solo es David, en la universidad segura mejorará mucho más.

―No puedes comparar a este con los otros ―tomo el teléfono y agrando la imagen―. Definitivamente gana.

A la hora de la salida, voy hacia la alberca. El sábado no asistí para hacer servicio comunitario, pues tenía la entrevista. Sin embargo, las instrucciones fueron claras; tengo que cumplir. Y espero que el entrenador Nava me acepte hoy para firmar. Después, Abel me encontrará en el estacionamiento e iremos a la dirección.

El olor a cloro inunda mis fosas nasales en cuanto entro a la zona. Es un aroma familiar, agradable y que me trae gratos recuerdos. Me gustaba competir, me gustaba sentir que volaba, creo que andar es lo más parecido a volar, pues flotas y avanzas en agua, aunque no en aire. Una de las chicas que estuvo durante mi desmayo (cuando Estela me ayudó a recobrar la conciencia), me mira, abre los ojos y le murmura algo a otra chica. Además de ella, hay tres chicos, pero ninguno parece estar interesado.

Cómo declararte a tu crush...sin morir en el intentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora