Jokers [Fred Weasley]

El partido

Marlena preguntó Hermione llevándose otra cucharada a la boca.

—Por las pruebas de quidditch.

—¿Te vas a presentar?— dijo Harry.

—Sí, llevo queriendo entrar en un equipo desde que tengo memoria.— sonreí.

—¿Tienes escoba?— preguntó Ron.

—¡La escoba!— dejé caer la cuchara contra el plato de cereales, salpicando a los de mí alrededor.

—¡Lena!— exclamó Hermione dando un saltito al ser salpicada por un trozo de cereal que le dio en la cara. Se lo limpió con desagrado.

—¡Perdona, Mione!— salí corriendo hacia la mesa de Hufflepuff—. ¡Casi se me olvida!

—Ey, ¿qué pasa?— me saludó mi hermano.

—Hola, Ced. Déjame tu escoba— le pedí atropelladamente.

—¿Para que la quieres?

—Me voy a apuntar al equipo de quidditch y papá todavía no me ha mandado la mía— expliqué impaciente.

—Está bien, iré a por ella— dijo levantándose.

—Gracias. ¡No tardes que las pruebas van a empezar ya!

Regresé a mi mesa y me dejé caer en el asiento, de espaldas a la mesa.

—Tranquila, lo harás bien. ¿En qué puesto te gustaría quedar?— preguntó Harry.

—¡Golpeadora o cazadora!— sonreí encogiéndome de hombros.

—¡Ah, no, rubia!— habló George, llegando junto a su hermano—. El puesto de golpeador ya está ocupado.

—Cierto, por nosotros— rió Fred.

Se sentaron cada uno a un lado mío.

—Bueno, pues para el puesto de cazadora— repliqué—. Pero, cuando terminéis en Hogwarts, me quedaré con vuestro puesto.

—Eso ya está mejor— dijeron a la vez.

En ese momento llegó Cedric.

—Ya te traje la...— se calló al ver a los gemelos—. Vosotros dos, ¿no tenéis otro lado para sentaros?

—¡Ey, relájate!— dijo Fred levantando las manos—. Ni que estuviéramos haciendo nada malo.

—Sí, alejaros de mi hermana— gruñó Cedric entrecerrando los ojos.

Me levantó de la cintura y me colocó colgando de un hombro suyo como un saco de patatas, y en el otro se puso la escoba.

—¡Bájame! ¡Se andar sola!— repliqué dando patadas—. ¡Además, todo el mundo está mirando!

—Cállate ya. Te llevaré al campo de quidditch.

—Ya hemos llegado, ¿puedes bajarme?— pedí.

—Claro— dijo bajándome cuidadosamente.

—¡Cedric y su querida hermanita!— se acercó un chico castaño y me ofreció la mano—. Soy Oliver Wood, el capitán de quidditch de Gryffindor.

—Marlena Diggory— la acepté—, vengo a hacer las pruebas.

—¿Y eres tan buena como tú hermano?

—¿Perdona? Soy mucho mejor que él— reí, ganándome una colleja por parte de Cedric.

—¡Oye!— le pisé el pie.

—¡Ay!— se quejó y le saqué la lengua con burla.

—Me gusta tu potencial. Serías una buena golpeadora, aunque dudo que alguien pueda superar a los Weasley— dijo Wood.