ONE SHOTS彡 TUA AND CAST

𝙲𝚒𝚗𝚌𝚘 𝙷𝚊𝚛𝚐𝚛𝚎𝚎𝚟𝚎𝚜

𝗛𝗲𝗹𝗮𝗱𝗮

—¡Emma! —Gritó Cinco— ¡Vanya! ¡Ben! ¡Papá!

No encontraba a nadie, estaba solo en medio del apocalipsis, seguramente, su familia estaba muerta, junto a su amor, su amada de ojos claros y cabello oscuro.

Se arrodilló, cayendo en al piso al igual que sus esperanzas de volver a su línea temporal, las lágrimas amenzaban por salir, estaba solo en medio del apocalipsis.

No fue que se sorprendió hasta que escuchó a alguien tratando de salir de un montón de ladrillos, este salió corriendo hacia allá y ayudo a salir a esa persona, al sacar a la persona por completo vio a Emma, lastimada y con quemaduras.

El chico la vio, conciente y con vida, la acunó en sus brazos, apretandola contra su pecho, pudo sentir como la chica empezaba a llorar de angustia, se sentía muy mal por todo.

—Ya estoy aquí, nena —Dijo— ¿Porque pareces una niña? Supongo que pasó tiempo —Habló Cinco.

—F-Fue Reginald, el me hizo quedarme así —Dijo la chica entre sollozos, esta levantó la cabeza y lo vio— Estás aquí —Tomó la cara de Cinco entre sus manos — Te extrañé tanto.

—Creí que habías muerto —Dijo Cinco.

—Creí lo mismo de ti.

Los dos se abrazaron, aferrándose el uno al otro, sin querer soltarse nunca, la chica enterró su cuello entre el hueco que había entre el cuello el hombro de Cinco, aspirando el olor de el nombrado, tratando de guardar en su mente ese momento.

Cinco no pudo aguantar más y tomó a  Emma de las mejillas rápidamente, para poder juntar sus labios con ella, olvidandose de sus lastimaduras y quemaduras, Emma al principio se sorprendió pero luego de unos segundos correspondió, al separarse se miraron con una sonrisa.

—Te amo tanto, Emma —Dijo Cinco.

—También te amo, Cinco.

Así, con varias inquietudes y alti bajos, pasaron 3 años, afrontando todo tipo de obstáculos.

Pero una noche de Diciembre, cuando la nieve caía a montones, la chica estaba sufriendo hipotermia, su cuerpo temblaba mucho y sus labios estaban morados, su cara estaba roja y su respiración se cortaba.

Cinco y ella se abrazaban, tratando de darse calor el uno al otro, acostados en unos derrumbes que los protegían un poco del frío.

La chica empezó a respirar con pesadez, asustando a Cinco.

—No, ¡No no no! —Se sacó lo que tenía de abrigo y se lo puso a Emma— Quedate conmigo —Besó a Emma.

—Ci-Cinco, pon-ponte la ropa —Habló Emma.

—Tengo que salvarte.

Lastimosamente, ya era tarde, la chica estaba muriendo.

—T-te amo, Ci-Cinco —Dijo, para dar su último suspiro.

Cinco empezó a derramar lágrimas, su compañera se había ido, en sus brazos, el abrazó el cuerpo inerte de Emma y empezó a llorar, rogando que todo esto solo fuera una pesadilla y despertar junto a su amada.

—También te amo, Emma —Dijo llorando.

Había quedado completamente solo.

¡Espero que te haya gustado!
Dedicado a Grazer_bb