Eres tú otra vez

Parte cinco

Hoy era mi primer día trabajando en el especial, en lugar de sentir una felicidad enorme, sentía una gran carga sobre mis hombres, una vez que firmé el contrato Stella no tardó en hacer oficial la noticia, incluso ella había borrado su nombre dejando resaltar el mío, ahora todos estaban hablando del famoso especial que todos esperaban, cada persona de esta ciudad se moría por tener detalles sobre la vida privada de Evan Davies, mis redes sociales habían explotado con mensajes llenos de solicitudes, de preguntas para Evan, podía resumir gran parte de ellas a una sola ¿Tiene novia? cada vez que leía eso me prometía a mi misma, no realizar esa pregunta. Por mi parte no había declarado nada en ningún medio, pero las personas no dejaban de mirarme en la calle, incluso había visto a una chicas colegialas  cruzar la calle solo para mirarme de cerca, lo ultimo que necesitaba eran reporteros que deseaban hablar conmigo, pero después de todo no era una Kardashian para llamar tanto la atención. Salí dos horas más temprano de la casa,  hacia la oficina para recoger mi material de trabajo, tome mi portátil y mis notas llenas de garabatos que solía escribir, me detuve en mi camino para comprar un café en mi lugar favorito, al llegar al The Empire cambié mis lentes de sol por mis lentes regulares, tome el ascensor que estaba apunto de reventar, tarde varios minutos en poder llegar a mi piso, Chloe me estaba esperando con la misma sonrisa infantil, a pesar de haber asistido al colegio juntas yo era un año mayor que ella, pero siempre me había sentido más vieja a su lado, incluso ahora me sentía diez años más vieja.

—Quería presentarte al equipo con el que estarás trabando, ellos son los mejores en su campo y son él equipo que trabaja directo con el señor Davies.

Chloe me condujo a una sala cercana, una sala abierta con varios escritorios que seguían siendo mejores que el mío, ella carraspeó su garganta y todos voltearon a mirarnos, algunas miradas me reconocieron de inmediato y todos se pudieron de pie.

—Chicos esta es mi amiga Charlie Grayson, Charlie ellos son el Señor Lee, Maya, Jenny, Harry y John .

El señor Lee era el más viejo, él debía estar a cargo de los demás, por que sus compañeros sin duda eran de nuestra edad, los salude sacudiendo la mano.

—Es un enorme placer conocerla, hemos leído sus trabajos y son nuestros favoritos — dijo Jenny.

—No pude contener mis lágrimas en la boda de los
Grimaldi, debe ser muy buena para no llorar.

—Estoy acostumbrada a las bodas, hace mucho que deje de llorar por ellas.

—Si necesita algo de nosotros no dude en pedirlo.

El señor Lee se acercó para estrechar mi mano.

—Lo que usted necesite Charlie — Lee golpeo a Harry en la parte atrás de la cabeza, no pude evitar recordar a Elena.

—Es señorita Grayson baboso.

—De hecho me sentiría más cómoda si me llaman Charlie, si son amigos de Chloe también son míos.

—Buenos días.

Aquella voz que era difícil de olvidar en especial cuando resonó detrás de nosotros, ellos saludaron a su jefe como su hubieran visto a un fantasma, debía ser muy malo con ellos, para que la personalidad les cambiara tan rápido cuando él estaba presente, si él creía que yo sería sumisa como ellos debe de estar equivocado, fui la última en darme la vuelta, apenas si le sonreí. Espere a que este entrará en su oficina para seguirlo, me despedí de los chicos que volvían a sus puestos, entre a la oficina sin prestarme atención, tome asiento en el sillón en medio de la oficina, saqué mi laptop y comencé a trabajar e silencio.

—¿Que cree que está haciendo?

—Trabajar.