♡
♤
°☆
•°
◇•☆
☆◇
°
°♡
□
▪□○
La rabia se contrajo cada vez más en su pecho, sus ojos se habían hundido en un profundo color carmesí gracias a el frío que soporto en el camino de regreso, pero ni eso pudo apagar el gran calor de furia que se apoderó de su cuerpo, esa chica estaba definitivamente echa un infierno.Cerró la entrada de un portazo, no le importó que sus piernas estuviesen gélidas, sencillamente quería subir, imprimir una fotografía de Jungkook y pegarla en su almohada para golpearla hasta que se quedara sin fuerzas.
"¿Tengo super poderes o algo así?" Lisa aún quería creer que se trataba de otra broma, porque no podría haberle dejado más claro todo lo que había estado sintiendo esos días, todas las noches de agonía en las cuales buscaba respuestas que no tenían preguntas formuladas. ¿Qué si estaba enojada? Realmente estaba decepcionada, tal vez hubiera comprendido que Jungkook no entendiera nada de lo que había dicho, el era algo idiota después de todo. Pero aquel no era el punto, sino que se sentía algo resentida por sus palabras, y su típica estúpida frase.
"Tu me odias, yo te odio, ¿está mal molestarnos?"
¿Incluso no le había dejado claro que ella no lo odiaba en lo absoluto? ¿Que más necesitaba demostrarle para que viera que no es así? Ella le había compartido uno de sus sentimientos más importantes, su confianza. Porque hablar de la muerte de su padre, y de su vida íntima, sólo lo hacia cuando finalmente sentía confianza en aquella persona..o acaso..¿Jungkook realmente la odiaba de esa manera? ¿Aún no asimilaba la idea de tener que vivir con ella y su madre? Todo esto la estaba volviendo demente..
----¡Ush!, ¡Eres tan idiota Jeon Jungkook, tan idiota, tan estúpido, tan tonto, tan imbécil!--- exclamó arrojando su pequeño bolso negro en un costado de la entrada.--- ¡quiero golpearte a ti, y luego golpearme a mi por ser tan ilusa!--- sus gritos desaforados, resonaron en todo el comedor, siendo así escuchados por IU, quien anteriormente había estado buscando un vaso de agua allí.
----Nena..--- llamo desde la cocina.--- ¿eres tú muñequita?---
Lisa pasó una mano por su cabello e intento resguardar su calma al escuchar el llamado, no quería desquitar su enojo con nadie en ese momento.