No tengo miedo a...

Capítulo 19

Tuvo que agitar un poco la cabeza tanto para apartarse sangre de los párpados y para intentar recuperar visión después de aquel impacto.

Sintió unas manos que la aferraron de los brazos para ayudarla a levantarse, se giró y vio que eran unos desconocidos entre las personas que estaba en el bar.

-¿Puede caminar?

-Hay que sacarla pronto.

Más gritos surgieron tras de ellos, la platinada se giró con los ojos entre cerrados por el dolor que le daba las luces a su visión. Entre las luces y las personas alcanzó a ver la figura de Hans adentrándose a la zona con unas llamas envolviendo desde sus manos hasta sus brazos, quemando la tela de la chamarra que portaba.

-Vay.....Váyanse -Elsa le quitó sus manos de encima.

-Hay que sacarte de aquí, estás herida.

Elsa iba a protestarles, pero justo fue cuando Hans lanzó una flama hecha bola hacia el pobre rostro del hombre que la quería ayudar.

-¡No, John! -La mujer se lanzó al suelo para verle a su cara que ahora estaba quemada.

Elsa le miró a Hans con la labios entre abiertos mientras apretaba con levedad sus dientes. Su perfil tenía su sangre y el hombro al brazo con el que estrelló en el cristal le temblaba.

-No hagas esto más tardado y así evitaremos que más personas sean lastimadas -Hans se detuvo para mirarle a los ojos - ¿De verdad creíste que no sabríamos que asesinaste a Toothiana?

-¿Quién?

-¡No finjas quién! -Cuando gritó avivó las llamas de sus brazos -La mujer que te estaba cazando, justo esa noche que fue tras de ti la encontraron muerte.

-¡Yo ni siquiera supe de su muerte hasta días después!

-Aun así te daré un fin, eres una amenaza a nuestros planes -Hans le apuntó impulsando su brazo de atrás hacia adelante, Elsa se apartó, pero esto sólo le dio oportunidad a Hans de acercarse para pescarla de su chamarra y jalarla hacia a este.

Rodeó sus puños de hielo sólido para golpearle el rostro y soltarse de su agarra, fue entonces que se giró para correr y congelar el suelo para caer en una pierna y resbalar bajo la mesa y evitar un disparo de fuego.

Elsa observaba caminos hacia salidas de las cuales podría escapar, pero antes de impulsarse a correr se quedó ahí pensando ¿Esto era todo? ¿Descubrir personas dominadas por alguien que mató a sus padres?

¿Ser una víctima más y dejarlos libres?

Suspiró y se acarició las heridas de su perfil mientras las cubría con un poco de escarcha, suspiró y rodó con agilidad a otra mesa para esquivar más los impactos del fuego, pero Hans estaba acercándose más.

El pelinaranja se acercó a la mesa donde se suponía que estaba la mujer, pero al girarse no la encontró.

-¿Dónde.....

Elsa consiguió lanzarle una espina de hielo sólido de un perfil que se quedó clavada a su brazo, por cubrirse bajó las manos y esto le permitió saltar en dirección a este para envolverle el torso con sus piernas e impulsarlo a tumbarlo.

Pero cuando lo intentó sólo logró que Hans la abrazara de las piernas y se inclinara con ella aferrada a su cuerpo.

-Creo que te falto impulso, preciosa – Hans sonrió.

Ella gesticuló nervios y actuando rápido le dio una dura bofetada de hielo para querer separarse, pero Hans no la soltó y sólo se giró para estrellar su espalda y por lo tanto su cabeza contra la pared.