Capítulo 8

618 105 97
                                    

No quería despegarse de ella, al menos a la distancia que tomaba mirándola metros atrás en la ciudad para cuidar de ella y sobre todo saber que no había sido un sueño que estuviera viva.

Los pasos de la platinada eran más veloces de la mujer fotografiando las esquinas de las calles de los asesinatos, la mayoría había mucha gente, muy raro de aquello pues en los asesinatos que ha investigado siempre son en zonas muy solas.

Lo único es que si estaban solas eran a altas horas de la noche.

Terminó de fotografiar algunas para dirigirse a otra zona que dejó al final, el edificio de empresas Callaghan, donde sus padres habían muerto.

Cuando se acercó a este edificio, el peliblanco se alertó debido a que los hombres de anoche eran guardias de Callaghan, tenía que sacarla de ahí antes de que diera algún paso hacia ese edificio o lo más probable es que nunca saliera.

Había algo de sus reglas que no le permitía acercarse a personas relacionadas con los que ha matado, debido mantener perfiles bajos siempre y se arriesgaba a que alguien de esa empresa lo mirara.

Elsa fotografió la marca de imagotipo del edificio, las ventanas, las calles que lo rodeaban y hasta que fue interrumpida.

Ella se giró y miró atenta al hombre frente a él.

-Muy buenas días señorita, disculpe, pero ¿Podría saber para qué son las fotografías?

-Un proyecto -Fue discreta - ¿Hay algún problema?

-Es mi edificio y me gusta saber por el.

-¿Usted es Robert Callaghan? -La mujer no le miró asombrada – Creí que eran más viejo.

-Y yo que eras más amable.

-Mire sólo tomaré unas fotografías más y me voy ¿Le molesta?

-Quisiera saber sobre.....

Fue interrumpido cuando una motocicleta aparcó a un lado de ellos, la mujer miró extrañada al sujeto que se quitaba el casco para darse cuenta que era el peliblanco de la otra noche.

-¿Terminaste con las fotografías? Las necesito para la exposición de la arquitectura de las ciudades -Dijo el ojiazul hacia a esta.

Ella abrió su boca para decirle si estaba mal de la cabeza, pero le interrumpió el hombre.

-¿Eres estudiante de arquitectura?

-Por supuesto que......

-Sí -Dijo el peliblanco – Y se nos hará tarde si no nos vamos ya a fotografiar otros edificios.

-Oye espera -El hombre miró más atento a Elsa, haciendo que Jack maldijera en sus pensamientos – Eres la niña de Agnarr ¿No es así?

Agnarr, Agnarr ese nombre le era familiar a Jack.

-¿Te parezco que soy una niña?

-Bueno, en escuché de ti desde que eras una niña- Suspiró -Lamento en serio mucho lo de tus padres, ambos eran muy buenos amigos míos.

Elsa comenzó a sentirse incómoda y sobre todo por Jack quien estaba escuchando aquello.

-Mándale mis saludos a tu hermana.

Robert miró a Jack sin mucha atención para despedirse con una mirada.

Cuando se retiró, Elsa se giró para ver a Jack con una mirada extrañada.

-¿Qué haces aquí y por qué me interrumpes? ¿Te parece que tengo cara de estudiante?

-No sé si mal recuerdas, pero la otra noche en el bar con esos sujetos queriéndonos muertos eran personas de Callaghan que por tu culpa fueran tras de ti después de interrogar a uno de los suyos.

No tengo miedo a...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora